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Entrevista:MIGUEL ÁNGEL DAVARA - CATEDRÁTICO DE DERECHO INFORMÁTICO

"No tenemos por qué dar datos que atentan contra la intimidad"

Miguel Angel Davara (Madrid, 1946), catedrático de Derecho Informático en la Universidad Pontificia de Comillas (ICADE), anima a denunciar la vulneración de la Ley de Protección de Datos y la consiguiente intromisión de la informática en la vida privada. "No tenemos por qué dar datos que atentan contra la intimidad", asegura. Davara ha participado en Bilbao en el seminario Aplicación de la Ley Orgánica de Protección de Datos en las empresas y entidades públicas.Pregunta. ¿Qué pretende la Ley de Protección de Datos?

Respuesta. La informática en sí misma no es peligrosa, pero su utilización es potencialmente agresiva con la intimidad de las personas. Con los datos personales, tratados informáticamente con un programa de simulación, se puede obtener un perfil de la persona. Y eso, según la ley, va más allá de su intimidad y queda elevado en la Constitución a derecho fundamental.

P. ¿Puede haber delito?

R. Sólo en determinados casos, porque son responsabilidades civiles nada más. Sin embargo, se llega a sanciones de cien millones de pesetas. De todo el mundo tenemos las sanciones más altas. El pasado año, alcanzaron un total de 1.571 millones de pesetas que, recayeron, sobre todos, en sectores financieros, que son los más denunciados. También en los servicios de publicidad, porque a la gente le molesta recibir en su casa publicidad no pedida y quieren saber de dónde han sacado sus datos y por qué llegan a ellos. La Agencia de Protección de Datos no tiene aún medios para actuar de oficio y lo que hace es actuar contra denuncia.

P. ¿No está el ciudadano absolutamente controlado?

R. Totalmente. Creo que estamos en un momento en que más defendemos los derechos fundamentales, pero menos se protege la utilización de la informática para hacer, de verdad, reales estas garantías jurídicas.

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P. ¿Se puede controlar con los medios actuales esta intromisión en la intimidad?

R. Es muy difícil, prácticamente imposible. Lo que ocurre es que podemos decir que la inseguridad jurídica no existe. Una empresa corre un riesgo tratando información. Pero, como hay que tratarla, porque, de lo contrario, no se puede gestionar bien la empresa, lo que hay que hacer es conocer ese nivel de riesgo y asumirlo, porque es totalmente imposible que no se cometan infracciones con los medios informáticos y telemáticos de que se dispone.

P. Se piden datos personales con cualquier pretexto. ¿Cómo se defiende el ciudadano?

R. No hay por qué darlos si atentan contra la intimidad. Pero, sobre todo, falta una cultura popular porque la ley los defiende perfectamente, pero el ciudadano lo desconoce y acaba haciendo dejación de sus derechos.

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