Un pueblo dividido
Una parte del núcleo urbano de Sierra de San Cristóbal pasa a depender de El Puerto y otra, de Jerez
150 familias
El Ayuntamiento de El Puerto de Santa María (Cádiz) ejecutó ayer la sentencia por la que queda fijado el nuevo deslinde de los términos municipales de Jerez y El Puerto. La nueva frontera establece que a El Puerto le corresponde la franja de suelo de Sierra de San Cristóbal en la que están asentadas instalaciones de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y una zona de un pequeño núcleo urbano que hasta ahora pertenecía a Jerez de la Frontera. La nueva línea, establecida según criterios del Instituto Geográfico Nacional, divide el pequeño asentamiento entre ambos términos. Esta circunstancia, según el concejal de Urbanismo de El Puerto, Pedro Alamillos, será un problema a la hora de dotar de servicios a los residentes en las viviendas afectadas.
Yacimiento
Desde ayer la mayor parte del núcleo urbano pertenece a El Puerto, pero cuatro viviendas quedaron aún dentro de los límites jerezanos.
Dado que los vecinos, unas 150 familias, han vivido hasta ahora bajo la tutela del municipio de Jerez, el Ayuntamiento de El Puerto ofreció ayer a una delegación de concejales jerezanos la posibilidad de que la totalidad del núcleo quede de nuevo inscrito en su término, siempre que el resto del deslinde fuese aceptado por ambas partes, tal y como establece la Junta de Andalucía. Esta oferta fue rechaza por la delegación jerezana porque el Ayuntamiento se muestra contrario a aceptar la frontera establecida por la Junta. Acto seguido, en cumplimiento de la sentencia, un técnico del Instituto Geográfico trazó sobre el suelo la línea divisoria que marca los nuevos límites locales.
Así, el nuevo reparto de la tierra provocó ayer una singular escena, cuando los que hasta ahora habían sido reconocidos en el censo de Jerez, pasaron a engrosar la lista de habitantes de El Puerto.
Algunos de ellos echaban mano, incrédulos, a sus carteras para enseñar su DNI, como garantía de origen. "Nos seguimos considerando jerezanos, aunque ahora residentes en El Puerto", explicaba ayer el presidente de la asociación de vecinos, Juan Jiménez. "Llevamos mas de 500 años viviendo como jerezanos, y eso no se puede cambiar de la noche a la mañana", añadió.
Con todo, el portavoz vecinal denunció las carencias que ha sufrido el barrio y reconoció: "Nos han tenido olvidados, aquí no hay más que ratas".
De esta forma los vecinos afectados ya han enumerado un listado de peticiones a su nuevo Ayuntamiento, que a su vez ha establecido contactos con la Diputación de Cádiz para mejorar los accesos por carretera al núcleo urbano.
El concejal de Urbanismo de El Puerto, Pedro Alamillos, anunció ayer la puesta en marcha inmediata de los servicios a los nuevos vecinos. Al mismo tiempo, aseguró que su Ayuntamiento, visto el criterio de las familias afectadas, mantendría la oferta al gobierno local jerezano, "por si cambian de opinión".
Mientras, el Ayuntamiento de Jerez continua adelante con el recurso presentado contra la decisión de la Junta, pese a que la división ha sido ratificada por una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.
El nuevo deslinde, ejecutado ahora, otorga al término de El Puerto las instalaciones de los depósitos de agua de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y la zona de las cuevas de la sierra, donde el Ayuntamiento portuense pretende llevar a cabo alguna actuación con fines turísticos. Esta área, cercana al yacimiento fenicio de Doña Blanca, está previsto que albergue un extenso parque arqueológico, que se incorporará a la oferta cultural y de ocio de El Puerto. El concejal de Urbanismo reconoció ayer: "Además del valor patrimonial de los terrenos, no podemos negar el valor económico que definitivamente es reconocido como portuense".
Con este acto se viene a solventar un litigio histórico entre ambas ciudades, que se ha mantenido vivo los últimos 400 años. La sentencia que ha culminado con el deslinde de ayer fue dictada en 1995 y motivó numerosos recursos del Ayuntamiento de Jerez.
