_
_
_
_
_
HISTORIA900 AÑOS DE SU MUERTE

Una exposición analiza en Valencia la realidad y el mito de El Cid

Ferran Bono

El Cid: Mito y realidad es el título de la exposición que ayer se inauguró en el rebautizado Museu de Prehistòria i de les Cultures de València. La muestra pretende contextualizar la figura histórica del guerrero cristiano que murió en Valencia en 1099, centrándose, precisamente, en la estancia de Rodrigo Díaz de Vivar en tierras valencianas, y alejándose de cualquier hagiografía.

De hecho, uno de los objetivos de la primera exposición temporal del museo, desde que se han refundido las áreas de Prehistòria y Etnologia, es aproximar al visitante a la Valencia del convulso siglo XI, a través del patrimonio, las gentes y las costumbres de la época. Sorprende, en este sentido, la exhibición de los enseres personales de un caballero. Gracias a que los ocultó hace alrededor de 1000 años, y jamás volvió a recogerlos, se ha conservado en buen estado este conjunto completo descubierto en la población albaceteña de Liétor, de gran valor etnológico y arqueológico. Con evidente voluntad didáctica, la exposición diferencia claramente entre el personaje histórico que campó por los reinos de taifa valencianos y el mito originado en torno a él, que la redacción de El Cantar del Mio Cid contribuyó a expandir fuera de la península ibérica. El diputado de Cultura y vicepresidente de la Diputación de Valencia, Antonio Lis, explicó el cambio de significación del mito de El Cid a lo largo del tiempo. Recordó la imaginería romántica que lo vestía como un guerrero oriental y mencionó la imagen épica del personaje, como símbolo de la hispanidad, transmitida por el franquismo. El director de la Red de Museos de la Diputación de Valencia, Enrique Pérez Cañamares, insistió en la necesidad de diferenciar entre el papel histórico de El Cid y su mito. La intención es proporcionar una visión histórica, aportando también una muestra de la imaginería que envuelve al guerrero medieval, pero evitando cualquier manipulación, como la "franquista" , que lo convirtió en "emblema de la unidad de destino universal" de España, añadió Pérez Cañamares.

Cronistas árabes

Así, la exposición se divide en tres en grandes bloques: el contexto histórico, el personaje histórico y el mito, según relató Santiago Grau, jefe de la unidad de difusión del museo. Herramientas, armas, vestimentas, cartografía, fotografías, documentos, ediciones antiguas de las crónicas del Cid, reproducciones de la espada del guerrero (Tizona), entre otros numerosos objetos, forman parte de la muestra que se abre con un vídeo explicativo que contextualiza históricamente el mundo conocido en la época de El Cid. Los fondos proceden del Museo Arqueológico de Dénia, del del Ejército, de las catedrales de Salamanca y Oviedo y de la Biblioteca Nacional, entre otros muchos museos e instituciones.

También se han incluido documentos de cronistas árabes contemporáneos de Rodrigo Díaz de Vivar, quien partiendo de Burgos recorrió gran parte de la península hasta morir en Valencia. De hecho, se ha organizado la exposición en conmemoración del 900 aniversario de su fallecimiento, lo que ha servido también para poner en marcha el proyecto turístico Caminos de El Cid, en el que participan ocho Diputaciones. Una exposición explicará en marzo el contenido de esta iniciativa en el Centre Valencià de Cultura Mediterránea, La Beneficència, que alberga el Museu de Prehistória i de les Cultures Valencianes.

En la presentación de la exposición El Cid: mito y realidad, que se clausurará el 30 de abril, también participó Fernando Sánchez Moreno, representante del Instituto de Cultura del Ayuntamiento de Burgos, ciudad natal de El Cid, donde se ha exhibido otra muestra.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Ferran Bono
Redactor de EL PAÍS en la Comunidad Valenciana. Con anterioridad, ha ejercido como jefe de sección de Cultura. Licenciado en Lengua Española y Filología Catalana por la Universitat de València y máster UAM-EL PAÍS, ha desarrollado la mayor parte de su trayectoria periodística en el campo de la cultura.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_