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FIESTAS TRIBUTO TRADICIONAL A SANT ANTONI

18 metros de leña de la "foguera" de Canals retan a la lluvia

El mal tiempo no aguó el inicio de las fiestas patronales de Canals (La Costera) del año 2000. A pesar de la persistente amenaza de la lluvia, los canalenses encendieron ayer, víspera del día de Sant Antoni, la foguera de unos 18 metros de altura que ofrecen anualmente como particular tributo al patrón de la localidad.Después de les Vespres Solemnes, el párroco de la iglesia mayor de la localidad encendió un cirio en la lámpara de Sant Antoni, donde se conserva el fuego sagrado durante todo el año.

A continuación, los clérigos, las autoridades municipales y los festeros salieron a la plaza mayor y rodearon la pira vegetal. Volteos de campanas, himnos, tracas y vitols anunciaron el inminente encendido de la gran masa de matojos y leña de pino. Pocos minutos después, el humo blanco y el fuego ofrecían un espectáculo impresionante.Durante toda la jornada de ayer, a pesar de las inclemencias del tiempo, se vivió con intensidad la celebración de los actos del día grande de las fiestas patronales. Por la mañana, se celebró la tradicional crida de la Festera de Gràcia, cargo que este año ostenta Tere Llàcer. En el acto se da la bienvenida a los forasteros y se pide la participación de todos los vecinos de Canals. Asimismo, el alcalde, Vicente Felipe, prestó al comité festivo la Bandera de Sant Antoni, que custodiará el festero mayor, Juan José Jiménez, el Bandera, durante el periodo de celebraciones. Al final de la mañana, la comisión de fiestas hizo ofrendas al patrón en la Missa de Gràcia.

Hoy, lunes, festividad del patrón Sant Antoni Abat o del porquet, se celebran los actos religiosos. Mañana, día de Els Parells, los festeros mayores participarán en una singular cabalgata, que servirá como colofón a las fiestas mayores. Durante el trayecto por toda la población, el Cuiros, segundo festero, y el Bandera, arrojan diferentes obsequios al público que los recibe. El desfile, que termina al anochecer en la plaza mayor, concluye cuando los sombreros de los dos festeros mayores son lanzados al aire con un último y sonoro Vitol, que despide las fiestas hasta el próximo año.

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