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"Nissaga de poder", al estilo húngaro

Nissaga de poder arrasó en Cataluña. Y lo mismo Médico de familia en todo el país. Son sólo dos ejemplos de series televisivas de producción autóctona que han obtenido un gran éxito. Pero hay muchos más. La ficción hecha en casa se ha impuesto a la norteamericana, que había copado el género desde el mismo nacimiento de la televisión. Las series españolas han desbancado al fútbol y al cine de Hollywood de los primeros puestos en las listas de audiencias. Es un triunfo de la industria audiovisual doméstica, aunque una victoria a medias. La economía de un país se mide también por su capacidad de exportar lo que fabrica. Y, en esto, el sector ha fracasado por ahora. El director general de la Corporación Catalana de Radio y Televisión (CCRTV), Jordi Vilajoana, se preguntó ayer las causas en una mesa redonda que cerró un curso sobre el futuro de la televisión digital organizado en el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo. Vilajoana recordó que, mientras los formatos sí se han exportado en algún caso (Médico de familia, a Portugal, por ejemplo), los productos tal cual que se han emitido en España -o Cataluña- tienen dificultades para funcionar fuera de aquí. Una excepción que mencionó el director general fue Nissaga de poder, que según él, ha tenido "un éxito brutal" en Hungría. Eso sí, sólo después de haber "cambiado elementos" de la trama, que no especificó. Su teoría es la siguiente: la ficción española -la europea, en general- no funciona fuera de su ámbito de origen porque el star system, el reparto de actores, es local. Apoyó Vilajoana esta tesis con la constatación de que, al contrario de lo que sucede con las dramatizaciones, las series de dibujos animados, que carecen de star system, sí son exportables. Véase Las tres mellizas, que ha recorrido 126 países. En cuanto al futuro del medio televisivo, todos los participantes en la mesa redonda coincidieron en que los telespectadores van a optar por una u otra empresa en función de los contenidos que le ofrezca y no por la tecnología que emplee para llegar a sus receptores (terrestre, digital o cable). Así, Pablo Romero, director de programación de Canal Satélite Digital, dibujó un escenario en el que "todos los contenidos tendrán que estar en todos los medios", y el presidente de Vía Digital, Pedro Pérez, dijo: "Al telespectador le da exactamente igual que la programación le llegue por arriba o por abajo, lo que quiere son buenos contenidos". En este contexto, Vilajoana hizo un llamamiento a los operadores a dialogar con vistas a adoptar un decodificador único.

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