Los trabajadores de Daewoo califican su situación de "límite" y reclaman la intervención de las instituciones
El comité de empresa de Daewoo criticó ayer ante el Parlamento vasco las precarias condiciones laborales en que trabajan los 170 empleados de la multinacional coreana en su planta de frigoríficos de Vitoria. El presidente del comité, Diego Miranda, de UGT, compareció ante la Comisión de Trabajo y Acción Social a petición de Unidad Alavesa y dibujó un panorama desolador. "Antes de firmar el pacto con la dirección los trabajadores se estaban marchando de la empresa porque no aguantaban la presión", explicó. A raíz del convenio, 110 trabajadores obtuvieron un contrato indefinido. Pero la situación, según Miranda, sigue en precario: "Hemos dado un paso muy grande en estabilidad, pero en calidad [la situación] sigue totalmente estancada". El comité denuncia que la empresa le oculta "mucha información", que no ha renovado el contrato a tres sindicalistas y que incumple las medidas de seguridad elementales. "Se ha tomado la determinación de quitar los sistemas de seguridad para producir más rápido. Incluso se llega a trucar maquinaria", comentaron los representantes del comité de empresa. "Estamos en una situación límite. Las instituciones tienen que tomar parte". Los trabajadores recordaron, además, que los planes de la empresa indicaban que "al día de hoy, debían ser 412 las personas empleadas en la planta de Vitoria". Precisamente, gracias al plan presentado ante la Administración, Daewoo se ha beneficiado de ayudas por parte del Gobierno vasco y de la Diputación de Álava, parte de las cuales han quedado anuladas por la Comisión Europea. Miranda pidió "que esto no vuelva a ocurrir" y "que se tomen métodos de control" de las ayudas. "Es bueno que vengan empresas, pero si a mí me toman por un coreano europeo, me voy a otro sitio", concluyó. Los grupos políticos lamentaron la situación laboral de la empresa, aunque con diferentes matices. Gema González de Txabarri (PNV) afirmó que, "aparte de mensajes catastrofistas, Daewoo da trabajo a 170 personas que quizá de otra manera no trabajarían". Admitió que "siempre se aprende de la experiencia" y que "quizá en el futuro se puedan tomar medidas". Iñaki Ortega (PP) pidió mejorar "los cauces de control para las ayudas a empresas". La socialista María Teresa Rodríguez Barahona ironizó asegurando que el Gobierno vasco "va a reformar completamente las condiciones" en Daewoo. Koldo Usín (IU) denunció asimismo que el convenio con los trabajadores se firmó como "fruto de un chantaje", mientras que Pablo Mosquera, de UA, calificó la situación de "explotación". La dirección de la empresa reaccionó de inmediato a la comparecencia del comité en el Parlamento. Negó las acusaciones y criticó a los trabajadores porque, "en vez de llevar sus reivindicaciones a la dirección, las plantean por otras vías".
