Triunfaron los locales
Dos toreros locales, Soler Lázaro y Alberto Ramírez, lograron cortar una oreja cada uno a los descastados bureles que mandó Salvador Domecq. Pero en el descaste hay grados y así el que hizo quinto, que correspondió al torero de Burriana, Soler Lázaro, fue el mejor del encierro con diferencia. Y eso porque el resto, contando el sobrero que sustituyó al sexto, fueron unos auténticos mulos representantes cum laude de los toros que se dejan y se sortean las figuras. Lo mejor de la tarde es que la recaudación en taquilla, más alguna ayuda de la Diputación castellonense es a beneficio de una granja-hogar donde se atiende y cuida a disminuídos psíquicos. Eso es con diferencia lo único que justificó la función.El primer toro que le tocó en suerte a José Luis Moreno quedó moribundo tras un puyazo y el segundo, tras un par de rehiletes. El local Soler Lázaro estuvo a punto de pagar con sangre sus ansias de agradar. Se fue a porta gayola en su primero y como el animal saliera al paso del toril, se le echó encima, el torero aguantó y le echó al albero. Con su segundo, el mejor del encierro, no llegó a coger el sitio. Ramírez hizo lo más torero que se le ha visto en este coso con su primero y lo pagó con un tremento volteretón. Sólo la espada le privó de redondear la tarde.
Torero / Moreno, Soler, Ramírez
Toros de El Torero, chicos, sospechosos de pitones, descastados; 5º noble; 6º devuelto por otro del mismo hierro que resultó manso.José Luis Moreno: silencio y ovación. Vicente Soler Lázaro: ovación y oreja. Alberto Ramírez: oreja y ovación. Plaza de Castellón, 5 de junio. Corrida de beneficencia. Algo más de media entrada