El juez cita a Cortés a conciliarse con los vecinos a los que llamó racistas
El juzgado de primera instancia 67 ha citado al consejero de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes, Luis Eduardo Cortés, a un acto de conciliación con las asociaciones de vecinos vallecanas a las que en febrero tachó de "racistas" por sus críticas al "excesivo" número de realojamientos de chabolistas en la zona. El acto se celebrará el próximo 14 de mayo.La decisión judicial ha partido de la demanda de conciliación presentada por las asociaciones de vecinos de La Colmena, Norte Albufera, Madrid Sur, La UVA, Palomeras Sureste, Los Pinos de San Agustín y el Pozo del Tío Raimundo. Todas ellas exigen al consejero que se retracte de sus afirmaciones. Si no lo hace presentarán contra él una querella por injurias y por atentar contra el derecho al honor.
El presidente de la asociación de vecinos de Madrid Sur, Félix Palomo, explica que el propósito de las asociaciones es no llegar a mayores si se puede resolver el conflicto con una rectificación.
Cortés efectuó las polémicas declaraciones cuando las citadas entidades vecinales promovieron el gallo vallecano, una mascota cuya finalidad era seguir al presidente regional, Alberto Ruiz-Gallardón, para destacar sus "incumplimientos" con los distritos de Puente y Villa de Vallecas.
Las asociaciones se quejaban de que en estos distritos han sido realojadas 153 familias chabolistas de las 825 a las que se ha concedido un piso digno en los últimos cuatro años. También denunciaban la presencia en sus barrios de importantes puntos de venta de droga como La Celsa, La Rosilla y Las Barranquillas.
Para Cortés, 153 familias en un distrito donde residen 68.000 es una proporción insignificante. Pero los vecinos replican que en la zona ya existen muchos problemas de marginación para incrementarlos. "Vallecas es solidaria, como demuestra nuestra convivencia diaria entre payos, gitanos e inmigrantes, pero todo tiene un límite", añaden las asociaciones.
El gallo sólo desempeñó su tarea una vez y poco después Ruiz-Gallardón sorprendió a las enojadas asociaciones con el compromiso de desmantelar los poblados de La Celsa y La Rosilla.
