_
_
_
_
_

Brasil amenaza a Telefónica con una nueva multa de hasta 2.700 millones

El Gobierno brasileño, después de haber impuesto en menos de un mes dos multas a Telefónica por 18,5 millones de reales (alrededor de 1.600 millones de pesetas), ha lanzado una nueva y dura amenaza a todas las operadoras de telefonía en el país. La Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) anunció que podrá imponer multas de hasta 30 millones de reales (unos 2.700 millones de pesetas) a las compañías que no privilegien productos y servicios nacionales. Las anteriores sanciones se debieron a retraso en la prestación del servicio.

La dirección de Anatel, tres días después de haber aplicado la nueva multa a Telefónica, ha anunciado la medida, aclarando que el castigo se dará siempre que las operadoras opten por productos y prestadores de servicio extranjeros "cuando se produzca equivalencia en precios, calidad y plazos con similares nacionales". La medida podrá significar un revés a los intereses de Telefónica en Brasil, que hace menos de un mes afirmó haber reunido un grupo de nueve empresas suministradoras de material y servicios (todas españolas), con las cuales trabajaría en el país, para romper con las reglas del mercado, dominado hasta la privatización por compañías brasileñas. Telefónica ha sido multada dos veces en las últimas cuatro semanas. La primera multa, de 3,5 millones de reales (2,2 millones de dólares), fue impuesta por el Ministerio de Justicia. La segunda, por la Agencia Nacional de Telecomunicaciones. Las dos tuvieron la misma razón: falta grave en los servicios prestados al público. En febrero, a la misma Telefónica se le impuso una multa de 15 millones de reales (alrededor de nueve millones de dólares), por atraso en la entrega de líneas telefónicas adquiridas 24 meses antes.

Renato Guerreiro, presidente de Anatel, afirma que Telefónica hizo "un esfuerzo grande para ampliar los servicios en São Paulo, pero sin el debido respaldo técnico". Todo eso, según Guerreiro, "explica pero no justifica el daño causado a los consumidores". Fernando Xavier Ferreira, presidente de Telefónica, a su vez, reitera que lo peor ya pasó, y que hasta finales de mes (en realidad, dijo que "hasta el final de la semana que viene", pero luego se corrigió) todas las líneas estarán instaladas. Desde septiembre, alrededor de 920.000 nuevas líneas fueron instaladas por Telefónica, la compañía presidida por Juan Villalonga, que heredó un déficit de casi medio millón de líneas pagadas pero no implantadas por la antigua estatal Telesp.

La empresa, sin embargo, afirma que es imposible asegurar cuándo los seis millones de usuarios inscritos para nuevas líneas serán atendidos. La situación de Telefónica en São Paulo, la mayor ciudad y el principal mercado de telefonía en el país, acumula problemas desde finales del año pasado. La empresa no logró mejorar su imagen, pese a haber lanzado caras campañas publicitarias, y merece en la prensa amplios espacios diarios, cargados de críticas.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_