_
_
_
_
_

Destinos peligrosos

Cansados y aburridos de vacaciones en soleadas playas del Mediterráneo, algunos turistas occidentales se han encaminado hacia destinos más exóticos. Pero, en los últimos años, algunos de ellos han visto cómo un secuestro alargaba de forma involuntaria su viaje. O incluso han llegado a ser asesinados.En las montañas de Uganda, Bwindi ganó relevancia turística tras la proyección mundial de la película Gorilas en la niebla, acerca de la investigadora de Estados Unidos Dian Fossey, quien perdió la vida en su campaña de denuncia del peligro de extinción que corren estos simios en un área en la que operan varios grupos rebeldes.

En este entorno natural eran asesinados ayer ocho turistas occidentales y otros seis fueron liberados en una operación de rescate contra los radicales hutus ruandeses que les habían secuestrado en la madrugada del lunes.

Más información
Testigos de la matanza de Uganda afirman que los ocho turistas murieron a machetazos
El "turismo de los gorilas"

Pero éste no ha sido en absoluto un caso aislado. En los últimos años, muchos otros turistas occidentales han descubierto que lo que en principio parecía una exótica elección para cambiar de aires y pasar sus vacaciones resultaba finalmente ser menos sugerente de lo que en un principio pensaban.

En 1997, 58 extranjeros morían acribillados en el templo egipcio de Luxor cuando un grupo de islamistas abría fuego de forma indiscriminada contra ellos.

En Chad, cuatro turistas franceses fueron secuestrados en febrero de 1998 en el parque natural de Manda. La captura fue reivindicada por un grupo armado contrario al Gobierno. Días después, en una operación de rescate de las fuerzas militares, se conseguía su liberación.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

En agosto de 1998, cuatro turistas extranjeros eran secuestrados en el parque de Virunga, al este de la República Democrática de Congo (RDC), en un lugar no muy lejano a Bwindi. Uno de ellos era liberado días más tarde. El resto de los secuestrados sigue en paradero desconocido.

El cuerpo desnudo, desmembrado y carbonizado de una joven británica era encontrado en el parque nacional de Masai Mara, en Kenia, tras desaparecer en el mes de septiembre de 1998.

El pasado diciembre, tres británicos y un australiano morían en Yemen durante el asalto de las fuerzas de seguridad al grupo que mantenía secuestrados a 16 extranjeros.

Desde el 6 de abril de 1995, cuatro franceses permanecen en paradero desconocido en Senegal. Las circunstancias de su desaparición siguen sin conocerse, pero pudieron resultar muertos al verse mezclados en una escaramuza entre militares senegaleses y fuerzas independentistas.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_