Los farmacéuticos de Castellón arremeten contra Farnós
El presidente del Colegio de Farmaceúticos de Castellón, Mario Molina, no se amilanó ayer al hablar del Consejero de Sanidad, Joaquín Farnós. Molina respondió al máximo responsable de la sanidad valenciana, quien recriminó al colectivo su intención de acaparar mayores beneficios, afirmación tras la que señaló que "cada vez hay más negocio y eso va en detrimento de la sanidad". El presidente de los farmaceúticos castellonenses desveló ayer la existencia de un estudio realizado, entre otros, por "el nada sospechoso" Ramón Tamames en el que se indica que el 55% de las farmacias no son rentables. Y puso como ejemplo los beneficios obtenidos durante 1997 en su propio establecimiento. "Obtuve menos de dos millones de pesetas", aseguró. "Si piensa que nos aprovechamos de la enfermedad que habrá expedientes", le recriminó al consejero, antes de preguntarse si Farnós se está aprovechando de la sanidad valenciana. A continuación, Mario Molina recordó la calificación de "incapacidad permanente" que logró Joaquín Farnós en enero de 1995. "Después obtuvo el acta de diputado y fue nombrado consejero", señaló. El presidente de los farmaceúticos siguió el recordatorio a Farnós indicando que "no podrá acusar a ningún farmaceútico de estar inmerso en una recalificación cuanto menos dudosa y tampóco nos puede resposanbilizar de la hepatitis C". Para Mario Molina, el actual consejero de Sanidad está actuando "en contra del compromiso electoral del PP, partido al que está haciendo un flaco favor". En este sentido, mencionó los cinco partidos por los que ha pasado Farnós -UCD, Convergencia Castellonense, Alianza Popular, Unión Valenciana y PP- e indicó que "pongo en duda su intención pero no vamos a tolerar que una estrategia personal afecte a los farmaceúticos". Huida hacia adelante El presidente del Colegio de Farnaceúticos de Castellón quiso dejar bien claro el apoyo de estos profesionales hacia la administración autonómica "para el uso racional del medicamento", aunque precisó que "no toleraremos que se meta con nosotros sin sentido". Asimismo exigió que el respeto del colectivo hacia la administración sea correspondido. Además aludió a que las guardias que realizan las farmacias como servicio público no están pagadas y señaló que "encima de no estar bien pagados no consentiremos estar mal considerados". Para Molina los ataques de Joaquín Farnós al colectivo farmaceútico se debe a una "huida hacia adelante". "Está acosado y ha tomado la determinación de lanzarse contra un colectivo dócil, que se siente herido, aunque no ofende quien quiere sino quien puede", afirmó Molina, para puntualizar que "lanza esas presiones para quitárselas de encima".
