La Universidad de Oviedo descarta que Bueno imparta enseñanza reglada
La Universidad de Oviedo ha rechazado definitivamente la posibilidad de que el filósofo Gustavo Bueno, de 74 años, catedrático de Filosofía de la Religión, pueda seguir impartiendo enseñanza reglada y remunerada como profesor emérito. Sí podrá, por el contrario, seguir enseñando, en su condición de emérito honorífico, pero sólo en cursos de extensión universitaria y de doctorado.La junta de gobierno de la institución académica ovetense tomó la decisión por unanimidad el pasado viernes. De este modo, se rechaza la petición de los alumnos de Filosofía para que el profesor Bueno no se viera afectado por la nueva normativa sobre profesores eméritos, que limita a cuatro cursos el periodo máximo en que un profesor jubilado puede prolongar su actividad académica en calidad de emérito. Los estudiantes participaron en una huelga entre el 23 de octubre y el 9 de noviembre para exigir el retorno a las aulas de Gustavo Bueno.
Bueno se había jubilado hace nueve años, en septiembre de 1989, pero prosiguió con normalidad su habitual actividad docente como profesor emérito. El pasado 30 de julio, la junta de gobierno de la Universidad de Oviedo decidió modificar el reglamento de profesores eméritos e introdujo la cláusula que limita a cuatro años el periodo máximo en que se puede desempeñar esa condición. Hasta ahora no existía limitación temporal alguna, aunque este estatus se revisaba cada dos años.
Como consecuencia de esta reforma normativa, cinco profesores eméritos de la Universidad de Oviedo -entre ellos, Gustavo Bueno- se convirtieron en eméritos honoríficos de forma permanente. Esta nueva condición entraña su relevo de la actividad docente reglada y la pérdida de la remuneración que percibían por esa actividad. El rector, Julio Rodríguez, reiteró su invitación a Gustavo Bueno para que siga impartiendo enseñanzas no regladas.
