El sonido de los trenes
Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) tiene en Sarrià (Barcelona) allí un tramo al aire libre (hasta el paseo del Funicular) y unos talleres (junto a la calle de Vergós) también a cielo abierto. En otro tiempo, ninguna de las dos instalaciones era molesta; el presente, en cambio, es muy distinto: talleres y raíles se hallan junto a ventanas y balcones tras los cuales acostumbra haber gente que, especialmente de noche, gusta de dormir. La Asociación de Vecinos de Sarrià ha remitido al presidente de la empresa FGC una carta donde a la queja añade 496 firmas de damnificados. La presidenta de la asociación, Helena Presas, se exclama de que "una empresa que depende de la Generalitat incumpla las normas existentes, cuando la propia Generalitat se muestra tan exigente a la hora de hacerlas cumplir a los demás". La carta también detalla las molestias. Respecto a los talleres, dice: "Se hacen reparaciones mecánicas, se lavan vagones, se dejan los trenes en marcha, hay un teléfono que suena a través de un altavoz, los trabajadores hablan a gritos sin tener en cuenta que, por ejemplo, sean las cuatro de la madrugada". Sobre los ruidos provocados por las vías, Presas asegura que las propias mediciones de FGC "demuestran que se superan ampliamente los valores admitidos por la ordenanza". El director de la empresa, Miquel Llevat, ha respondido a los vecinos, pero lo que les ha dicho no les ha puesto como castañuelas. Así, respecto a los talleres, asegura: "No se lavarán coche por la noche, se apagarán los trenes cuando no sea indispensable que estén en marcha, se han eliminado los altavoces". La pregunta de los afectados es elemental: ¿por qué no se hizo antes? Llevat añade: "A pesar de ello, somos conscientes de que (...) se han producido y pueden volver a producirse en el futuro, concentraciones de actuaciones temporales que pueden molestar". Más aún: "Razones técnicas impiden dejar de hacer en los talleres de Sarrià trabajos de mantenimiento de los trenes". La respuesta respecto al trazado al aire libre es del mismo tenor: tras explicar que se ha procedido, por segunda vez, a afilar los carriles, operación que se repetirá dentro de poco, añade: "Es prácticamente imposible anular totalmente el ruido causado por la circulación de los convoyes en estos lugares de nuestra línea de especialísimas características de trazado, con rampas muy grandes para un ferrocarril y, simultáneamente, curvas de radio muy pequeño". Es decir, al menos el ruido, continuará.Talleres de los FGC. Los vecinos se quejan del ruido.
Para contactar con esta sección: Catalunya@elpais.es. [PI] VICENS GIMÉNEZ
