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El dueño de un bar mata en Granada de una cuchillada a un ex policía que medió en una disputa matrimonial

Francisco Caballero Illescas, un ex policía de 67 años, murió en la madrugada de ayer después de ser apuñalado en una pelea que tuvo con un amigo en Dúrcal, un pueblo situado a unos 25 kilómetros de Granada. Caballero trataba de intermediar en una discusión matrimonial que mantenía el agresor con su mujer cuando éste lo apuñaló. El suceso ocurrió en torno a las doce de la noche de ayer en el bar Marchena. Como era habitual, Caballero se encontraba con su amigo Antonio Bautista, que regentaba el establecimiento, además de la esposa de éste y un hijo del matrimonio. Según algunos testigos presenciales, tanto el ex policía como Bautista habían tomado algunas copas de más cuando éste último se enzarzó en una pelea familiar con su mujer, Antonia Garrote. En un determinado momento, Caballero le pidió a Bautista que no insultara más a su esposa, porque "era una buena mujer". Según vecinos del pueblo citados por Efe la mujer y el ex policía habían tenido relaciones. "Y entonces se enzarzaron los dos", relató ayer la mujer del agresor, "y se salieron a la calle, y yo ya no supe qué pasaba". En la puerta del bar, Antonio Bautista propinó una cuchillada a Francisco Caballero que le afectó la región torácica y le alcanzó el corazón. El ex policía cayó y fue la propia esposa del agresor y el hijo de éste quienes intentaron socorrer a Caballero y llevarlo hasta un puesto de la Cruz Roja. El peso del herido hizo que requirieran la ayuda de una ambulancia. Caballero fue trasladado luego hasta el Hospital Clínico de Granada, en donde falleció pocos minutos después. Antonia Garrote, la mujer del agresor, dio aviso a la Guardia Civil, que inició la búsqueda de Antonio Bautista. El agresor se entregó voluntariamente poco tiempo después. En el pueblo pocos vecinos podían explicarse ayer lo ocurrido, puesto que los dos hombres eran muy amigos desde hacía bastante tiempo. "Él ayudaba en el bar todo lo que podía", relató ayer la esposa del homicida refiriéndose al ex policía muerto. "Aquí venía, fregaba y hacía de todo". Garrote señaló que a veces, en estado de ebriedad, su esposo la había amenazado violentamente, pero que nunca había dado crédito a tales amenazas. Otros vecinos atribuyeron el origen de la pelea a un exceso de alcohol y al acaloramiento de la discusión entre ambos amigos. El juzgado de guardia ordenó ayer que se le practicara la autopsia al cadáver de Francisco Caballero, mientras el agresor era puesto a disposición judicial.

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