_
_
_
_
_

Los tres fallecidos de ayer elevan a ocho las víctimas en las playas alicantinas

Con las tres muertes de ayer ya son ocho las personas que han perdido la vida desde el 1 de julio en las playas alicantinas. Sobre las 11.30 horas fue encontrado el cadáver de un joven, en avanzado estado de descomposición, en la playa del Bancal de la Arena de Santa Pola (La Vega Baja). Llevaba un bañador naranja y unas aletas negras. Los equipos de rescate creen que estaba practicando el submarinismo y se ahogó hace varios días. Poco antes de las dos de la tarde fue hallado, flotando sin vida en el agua de la playa de La Roda, en Altea (La Marina Baixa) un bañista de 66 años. Se baraja la posibilidad de que sufriera una insuficiencia respiratoria o un paro cardiaco, porque ondeaba la bandera verde. Casi a la misma hora fue encontrado en la playa de La Mata de Torrevieja (La Vega Baja) el cuerpo sin vida de un veraneante de Pamplona de 65 años, Manuel G. M. Aunque falleció en una zona peligrosa, junto al cabo de Cervera, y había bandera amarilla, la Guardia Civil cree que pudo sufrir un corte de digestión. En menos de 48 horas han fallecido tres personas en las playas de La Vega Baja ya que el domingo por la mañana murió un joven en la playa de Campoamor, en el término municipal de Orihuela. La Cruz Roja rescató su cuerpo a las nueve de la mañana. "Había pasado la noche en una discoteca y a las siete de la mañana se comió un bocadillo y fue a bañarse con unos amigos; no sabía nadar y se metió mar adentro a buscar una pelota", explica la Cruz Roja. El domingo 19 de julio, también se produjeron otros tres fallecimientos. Uno en la playa de los Arenales del Sol (Elche); un hombre de mediana edad cayó al mar desde un acantilado en Torrevieja sobre las cinco de la tarde, y un joven de 17 años fue rescatado del agua en la playa del Postiguet (Alicante) a las seis y media y falleció mientras los trasladaban al hospital. En todos los casos ondeaba la bandera roja. Al día siguiente se ahogó otro bañista, el ciudadano alemán S. N., que sufrió una parada cardiorrespiratoria en la playa de La Marina (Elche). Este Ayuntamiento es el primero de la Comunidad que privatiza la vigilancia de sus playas. Dos de las ocho muertes del verano se han producido en las playas de Elche. El verano pasado se contabilizaron 13 muertes en las playas alicantinas.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_