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La Confederación de Minusválidos creará este año un millar de empleos

La Confederación Andaluza de Minusválidos Físicos (CAMF) representa a 800.000 disminuidos de los que un 60% son discapacitados físicos y un 40% psíquico-sensoriales. Cuando José Gómez Amate se hizo cargo de CAMF, hace 10 años, sólo contaba con seis millones de presupuesto para todo el año; hoy dispone de 800 millones y espera duplicar esta cantidad en un par de años. La CAMF, a través de las ocho federaciones provinciales y de las 146 asociaciones afiliadas, moviliza a más de 100.000 personas discapacitadas cada año. Sólo en el presente ejercicio piensan crear más de 1.000 empleos directos. "Nuestro objetivo", explica Gómez Amate "es que la sociedad se reconozca en nosotros y no nos margine; antes o después, todos seremos minusválidos, y eso debería tenerlo presente la gente". Hoy por hoy, entre un 60% y 70% de los discapacitados no tienen empleo. El año pasado la CAMF recibió más de 200 millones del Instituto Andaluz de Servicios Sociales para el desarrollo de proyectos de formación y de empleo. Además mantienen convenios de colaboración con varias consejerías: Educación, Trabajo e Industria, Medio Ambiente; también con Diputaciones, ayuntamientos, universidades, empresas de servicios... Todo esto, con el único objetivo de resolverle la vida laboral a las personas discapacitadas. La formación sigue siendo el talón de Aquiles de este colectivo. El año pasado impartieron 81 cursos de distinta índole, en los que participaron 1.067 alumnos.

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