Un Urdangarín luchó en 1212 contra los almohades
Batalla de Las Navas de Tolosa, 1212. Navarros, castellanos y catalanoaragoneses luchan contra los almohades. El día de San Andrés, el combate finaliza. Los cristianos han vencido. Las familias navarras participantes incorporan a sus escudos las legendarias cadenas del actual escudo foral. El resto, familias de provincias exteriores al antiguo reino, obtienen la autorización exclusiva para incluir en sus escudos las aspas de san Andrés. Entre ellos, los Urdangarín.Fernando García Arrartz, periodista, investigador militar y diplomado en heráldica, ha estudiado los orígenes y significados del apellido del futuro esposo de la infanta Cristina y de un escudo familiar que en otoño se unirá al de los Borbón. En el Repertorio de blasones de la comunidad hispánica, de Vicente de Cadenas y Vicent, se describe el escudo de esta familia, que también luchó "a las órdenes del conde don Lope Díaz de Haro, señor de Vizcaya'': "En plata, un roble de sinople [verde], frutado de oro, y dos lobos de sable [negro] atravesados al tronco, uno por delante y otro por detrás. Bordura de gules [rojo], con las aspas de oro que cupieren".
En heráldica, todo tiene un sentido: colores, metales, animales... Los lobos del escudo de los Urdangarín -ambos "con el pie diestro en acción de marchar"- son, por ejemplo, señal de una familia "fundadora de su capital", "símbolo de un corazón constante, que sufre las calamidades de una guerra y de un sitio con generoso y magnánimo pecho y que, cuando llega el lance del combate o salida de la plaza sitiada, devora cuanto encuentra en el ejército contrario...". El fondo rojo del borde es señal de la sangre que los primeros miembros de esta familia derramaron en la batalla, y el roble lleno de frutos de oro, signo de riqueza.
Cada color se asocia a un planeta, a un elemento, a un día y un mes, a virtudes teologales y a "calidades mundanas". Así, por ejemplo, la plata que domina el fondo del escudo Urdangarín los relaciona con la Luna, el agua, los lunes, junio, la perla y la fe. Según las interpretaciones heráldicas, un Urdarigarín es una persona caracterizada por su "pureza, integridad, obediencia, celo, firmeza, vigilancia y gratitud".
No sólo el escudo tiene su sentido. La etimología del apellido aparece ya en el Diccionario etimológico de apellidos vascos de Endika de Mogrobajo o en el Diccionario onomástico y heráldico de los hermanos García Garraffa, donde se le relaciona con tierras altas y con Tolosa y se hacen referencias a pruebas de "su hidalguía" datadas en 1650.
Urdangarín, Urdangarain, Urdangaray... Variaciones históricas de un apellido que está en boca de todos.
