_
_
_
_
_
GENTE

LOS DAÑOS DEL TABACO

Andrew J. Schindler, presidente del -grupo tabaquero Reynolds, puede decir con toda justificación que las desgracias nunca vienen solas. En plena ofensiva de las fuerzas antitabaco de todo EE UU para acorralar a la. industria, y cuando los directivos tienen que desayunar un sapo ahumado cada día, la hermosa casa de vacaciones de Schindler, situada en una isla privada de la costa de Carolina del Norte, ha quedado convertida en cenizas por un incendio provocado, muy probablemente, por una colilla. Los daños ascienden a 750.000 dólares (108 millones de pesetas), y además de la mansión de Schindler, hay otras casas afectadas. La isla Figure Eight es tan exclusiva que no tiene servicio de bomberos y el fuego se vio ayudado por un fuerte viento, con lo que las tareas de extinción se complicaron. Reynolds, la segunda empresa más importante de tabaco en EE UU, se aferra a que todavía no se ha establecido oficialmente que la causa del incendio haya sido un cigarrillo mal apagado, pero un trabajador que estaba haciendo reparaciones en la casa de Andrew Schindler ha confesado que fumó en el rato del bocadillo, y que después tiró la colilla encendida por los alrededores de la mansión. La vegetación seca, tras varias semanas sin lluvia, y el alto componente de madera en la estructura de la casa se encargaron de lo demás-

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_