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Quejas por el tono conciliador del Gobierno peruano hacia el MRTA

Juan Jesús Aznárez

Sin noticias sobre los resultados del nuevo diálogo emprendido por el Gobierno y el Movimiento Revolucionario Tupac Amaru (MRTA), el amistoso tono de Domingo Palermo, mediador del Ejecutivo, en su comunicación radiofónica del viernes con Néstor Cerpa Cartolini, comandante Evaristo, redujo la tensión entre las partes, pero fue protestado por buena parte de la prensa local y la opinión pública, contraria al compadreo con el terrorismo. Con la anunciada visita a la embajada del arzobispo de Ayacucho, Juan Luis Cipriani, se reanudan los contactos directos, suspendidos el pasado 31 de diciembre.El nuevo proceso negociador será importante porque informará sobre el grado de rigidez de los planteamientos conocidos: el Gobierno niega la excarcelación de emerretistas presos y Cerpa las exige. Mientras tanto, el director del diario Expreso, Manuel D'Ornellas, denuncia que la cordial conversación de Palermo con el comandante Evaristo ha desconcertado a la sociedad.

"Luego de haberse insistido durante casi un mes en que son sanguinarios terroristas quienes tienen aún de rehenes a 74 personas ( ... ), la conversación termina entre risas y felicitaciones". "Pensar que tanto se criticó a la prensa extranjera por llamar a ese grupo terrorista guerrillero o insurgente, para acabar haciendo nuestras autoridades bromas con gente de tan negro pasado y cruel presente". "¡Qué vergüenza!", tituló a cinco columnas el periódico popular Ojo, el de mayor tirada, y añadió: "Palermo llamó señor Cerpa y don Néstor al narcoterrorista y lo felicitó por su buen humor".

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