Las catacumbas culés en Madrid
La mayoría de peñas del Barcelona se camuflan en pisos de la capital por temor
Los culés se esconden en Madrid. Las 18 peñas barcelonistas de la capital pasan inadvertidas en la ciudad. Se camuflan en locales y pisos por miedo a represalias. Alguna de las entidades han abandonado un bar que perdía clientes o que amanecía con lunas rotas y pintadas. La barsafobia les azota.La primera peña blaugrana en Madrid -100 socios- se fundó en mayo de 1968. En la actualidad se reunen en un pequeño cuarto de un hostal de la puerta del Sol. En la entrada del local no hay referencias al Barcelona. El secretario de la peña, Esteban García, tampoco quiere que se difunda el lugar exacto de la sede. "En Madrid hay que tener cuidado por el riesgo que corres con los ultras del Madrid".
Los Amigos Blaugranas de Madrid -60 socios- escaparon de su sede hace varios años. "Nos nos dejaban poner un cartel por temor a'represalias", dice la presidenta Olga Romero Estibález. "Otro día llegaron unos críos con unas motos y dijeron que iban a romper el bar", prosigue Olga. "Ahora vamos a irnos a otro sitio donde espero que no pase nada puesto que son una familia que todo el mundo sabe que son catalanes"
Francisco López Valentin, vicepresidente de la peña barcelonista de Alcalá de Henares, recuerda que hace varios años les destrozaron el autocar a la salida del Vicente Calderón. "Ahora siempre nos vemos de incógnito para evitar problemas", dice López. Hace varios meses perdieron el cuarto del Bar Tigre donde guardaban sus símbolos los trabajadores de la fábrica catalana Roca que constituyeron esta peña hace 20 años.
La Peña Barcelonista de Torrelaguna tiene como sede un pequeño cuarto cedido por UGT. Raul Ruano, 51 años, presidente, asegura que nunca han tenido problemas porque "no tienen ningún cartel exterior".
"Es imposible tener una sede en territorio enemigo", comenta, Sergi, el topo, fundador de la Peña Unibarsatris Centro Madrid en 1992. "Nos reunirmos siempre en casa de amigos, casi clandestinos y al partido del Madrid iremos comprando entradas de reventa". La clandestinidad es un hecho: la última peña es la Fuenlabarsa (por Fuenlabrada) y tampoco tiene local.
