Retraso en el programa de 1995
El Gobierno español aún no ha comunicado oficialmente a Cuba cómo piensa ejecutar su anunciada suspensión de la ayuda oficial. "El programa de cooperación de 1995 va con retraso, pero hasta ahora nadie ha dicho si se va a completar o no ni nada de nada", afirma el viceministro cubano de Inversiones Extranjeras, Raúl Taladrid.De los 600 millones presupuestados en 1995, el ICI ha ejecutado menos de la mitad. Falta por entregarse leche en polvo por 180 millones, ayuda que, según los acuerdos firmados, debiera hacerse efectiva, como el resto de los fondos, antes del 15 de junio, plazo que el PP ya ha anunciado que no va a cumplir. "Estamos en una situación de impasse", comenta un funcionario español en La Habana.
Hasta el momento, Cuba ha, reaccionado con moderación: ha interpretado la medida del PP como un gesto político hostil, pero de escasas consecuencias económicas. "Lo triste es que España se sume a la política de EE UU, a contracorriente de la UE, y justo cuando sus empresarios pueden empezar a recibir presiones por la ley Helmes" opina un alto dirigente cubano. "Aunque la ayuda fuese mínima", agrega, "lo lamentable es la disposición, expresada además junto a Al Gore, de sumarse a la estrategia de presión y bloqueo contra Cuba".
Para el presidente de la Cámara de Comercio de Cuba, Rafael Salsamendi, la nueva política española no debe entorpecer los negocios de sus empresarios: "Sería ir contra la historia y el futuro". Como ejemplo pone la reunión del Comité de Cooperación Empresarial Hispano-Cubano, en La Habana, con una quincena de Cámaras de Comercio de España, bancos como el BBV y el BCH y 50 empresas, entre ellas Tabacalera y Argentaria.
