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La UE se niega a suavizar el embargo a los derivados del vacuno británico

España pone en duda la ecuanimidad del informe de la OMS

Los veterinarios aguantaron ayer las presiones del Reino Unido -sutilmente alentadas por la Comisión Europea- y se negaron a recomendar ninguna suavización de las medidas de embargo acordadas contra el vacuno británico y sus productos derivados. Catorce de los quince representantes del Comité Veterinario Permanente, reunido ayer en Bruselas, contestaron con un 'no' a la pregunta de la Comisión de si estarían dispuestos a eliminar de la lista de embargo las gelatinas y los sebos de ganado vacuno, productos utilizados por la industria alimentaría, cosmética, médica y farmacéutica. El único 'sí', claro, fue del Reino Unido.

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Algunos miembros del comité no ocultaron ayer su irritación por las presiones británicas y por el apoyo de la Comisión a estas presiones. Agustín Piedrabuena, subdirector general de Sanidad Animal y representante español en la reunión de ayer, afirmó que había acudido sin saber de qué se iba a hablar en la reunión: "Suerte quC, los portavoces de la Comisión dijeron a la prensa que se trataba de suavizar los acuerdos del pasado día 27", ironizó. Aquel día, Bruselas acordó prohibir la exportación. de carne de vacuno del Reino Unido y casi todos, sus derivados.El vehemente representante español hizo extensivas sus críticas a la Organización Mundial de la Salud (OMS), que, a su juicio, "está intentando aplicar la teoría del ventilador para que el problema del Reino Unido parezca un problema general".

Piedrabuena criticó el informe emitido por la OMS el pasado 3 de abril, en el que defiende que el consumo de gelatinas y sebos de vacuno afectado por encefalopatía espongiforme bovina no representa un riesgo para la salud humana. "Ese informe no recogía los datos difundidos el 29 de marzo por la Oficina Internacional de Epizootías -algo así como la ONU de los veterinarios- y daba la misma importancia a los 14.000 casos de encefalopatía detectados en el Reino Unido en 1995 que a los tres localizados en Francia". A su juicio, que el redactor del informe de la OMS sea británico no es ajeno a la bondad del texto.

En opinión de 14 de los 15 veterinarios reunidos ayer no tiene sentido suavizar ahora unas medidas, adoptadas hace dos semanas. Antes de plantearse cualquier suavización el Reino Unido deberá presentar un plan concreto de erradicación y control de la enfermedad, algo que hasta ahora no ha hecho y para lo que tiene de plazo hasta final de mes.

[Científicos japoneses han avanzado en desentrañar el mecanismo de las encefalitis espongiformes al criar unos ratones desprovistos de priones, las proteínas que al mutar causan la enfermedad. Estos ratones, no infectados, resultaron normales hasta pasada la mitad de su vida y luego presentaron síntomas de parálisis y degeneración neurológica. Este experimento, publicado en la revista Nature, indica que la enfermedad se desencadena cuando no existen suficientes priones sanos y puede no ser causada directamente por el prion mutado. El cerebelo de los ratones era más pequeño de lo normal, con ausencia de determinadas células, cuya conservación parece corresponder a los priones normales.]

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