Ceuta rechaza por temor a Marruecos el estatuto pactado entre Gobierno y PP

La expectativa del Gobierno y del PP de cerrar el mapa autonómico con la aprobación de los estatutos de autonomía de Ceuta y Melilla no se consumó ayer. El pacto alcanzado entre el Gobierno y el PP contó con el respaldo del Ayuntamiento melillense, controlado por el PSOE y el PP, pero se estrelló con el ceutí, donde la mayoría compuesta por partidos locales y nacionalistas recela del estatuto de autonomía para ambas localidades, fronterizas con Marruecos, por la falta de su reconocimiento expreso como comunidades autónomas.

La reunión celebrada entre representantes de ambos ayuntamientos con el ministro para las Administraciones Públicas, Jerónimo Saavedra, ofreció un resultado desigual y no cumplió su objetivo de culminar un compromiso histórico, procedente de la Constitución de 1978, como es dotar a Ceuta y Melilla de sendos estatutos.Los recelos de la delegación ceutí al proyecto de este estatuto fueron manifiestos. La delegación ceutí expresó al ministro su temor a que la localidad norteafricana quedara indefensa ante las pretensiones anexionistas del reino de Marruecos si no quedaba reconocido en el estatuto de forma explícita su estatus como comunidad autónoma. Un representante del PSOE ceutí (escindido del PSOE) llegó a manifestar que la ley de extranjería había dejado oscuros los perfiles de "quiénes son españoles y quiénes no lo son".

La falta de reconocimiento explícito de Ceuta y Melilla como comunidades autónomas se traduce en que carecerán de capacidad legislativa y de presencia en los foros europeos e internacionales, como el Comité de las Regiones. La representación ceutí defendió ante el Gobierno que ese estatus y esa presencia en Europa consolidaría a las localidades norteafricanas ante la amenaza de Hassan II. El ministro para las Administraciones Públicas contestó que ese estatus no era garantía de nada para el monarca hachemita.

La misma respuesta ofreció el vicesecretario general del PP, Mariano Rajoy -negociador en nombre de su partido en este pacto- en una rueda de prensa posterior en la que añadió que los hipotéticos intentos anexionistas de Hassan II contarían con la oposición frontal del Gobierno y del PP.

Convencer al alcalde de Ceuta

Fue esa también la actitud del alcalde de Melilla, Ignacio Velázquez, del PP. Velázquez, que habló en nombre de la mayoría municipal melillense, reconoció que el estatuto de autonomía no le satisfacía plenamente, pero encontró avances significativos con relación a proyectos anteriores. Adelantó que se entrevistaría con el alcalde ceutí, Baltasar Fernández, del grupo político Progreso y Futuro, con la intención de convencerle para que cambiara de actitud.La fórmula pactada por el Gobierno y el PP consiste en una filigrana que ha tenido que superar numerosos escollos políticos y jurídicos para que sea posible que dos ciudades tengan estatutos propios de una comunidad autónoma, sin perder sus competencias municipales.

Ceuta y Melilla, de acuerdo con la fórmula pactada por el Gobierno y el PP, mantendrán las peculiaridades que otorga a los municipios la Ley de Régimen Local, a los que añadirá las posibilidades financieras de las comunidades, así como numerosas competencias con las que ya cuentan la generalidad de las autonomías españolas.

El alcalde melillense destacó como nuevas aportaciones al estatuto su tramitación por ley orgánica, al igual que el resto de las comunidades autónomas, así como la posibilidad de tener iniciativa legislativa, que se podría materializar a través de las Cortes Generales. No obstante lamentó que las autonomías ceutí y melillense no puedan contar con capacidad legislativa propia, pero resaltó que este hecho no era razón suficiente para rechazar un estatuto, ya que, de otra manera, "sólo queda el vacío".

La posición del Gobierno y del PP es distante ante la actitud que pueda adoptar en los próximos días el crítico Ayuntamiento ceutí. El ministro Saavedra manifestó ayer que el Gobierno cumpliría su compromiso de enviar a las Cortes los proyectos de estatuto antes de fin de mes, al no sentirse vinculado por el resultado que arrojen las votaciones de ambos ayuntamientos.

Sin embargo, el vicesecretario general del PP, Mariano Rajoy, discrepó y adelantó que su partido no apoyará el estatuto para Ceuta si previamente no es respaldado por la mayoría del Ayuntamiento. No obstante, Rajoy confió, al igual que el alcalde melillense, en que la mayoría ceutí reflexione y terminedando el visto bueno al estatuto.