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Los guerristas hacen fracasar el intento de Chaves de celebrar el congreso regional tras las elecciones

Lourdes Lucio

El presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, sufrió ayer un duro revés al no convencer a la mayoría de los dirigentes socialistas andaluces de que aplazaran el debate interno hasta después de las elecciones autonómicas de junio. El comité director -el máximo órgano entre congresos- del PSOE andaluz apoyó en votación secreta, por 81 votos a favor (un 53,6%), 66 en contra (43,7%) y cuatro abstenciones, las propuestas del secretario general, el guerrista Carlos Sanjuán, quien exclamó: "Soy feliz". Pese al tropiezo de ayer, los renovadores no descartan presentar una candidatura alternativa a la de Sanjuán en el congreso regional, que se celebrará en Granada del 8 al 10 de abril.

La victoria de Sanjuán fue aceptada sin "dramatismo" por Chaves, quien dijo que no se siente derrotado, sino "totalmente respaldado por el partido".Sin embargo, el resultado causó gran inquietud entre los renovadores asistentes a los debates socialistas de Toledo. Nada más conocerse la noticia proliferaron los comentarios y se formaron corrillos de dirigentes socialistas. Los gestos de preocupación eran evidentes en el presidente castellano-manchego, José Bono; el ministro para la Presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba; el titular de Interior, Antoni Asunción, y varios secretarios regionales del partido, informa Anabel Díez.

Una vez que Chaves se decantó por el aplazamiento -tesis defendida por Felipe González-, los guerristas no disimularon en el comité director sus críticas hacia el presidente andaluz, incluso cuestionando su nominación como candidato a la presidencia de la Junta. Sanjuán, tras algunos titubeos, zanjó la cuestión: "Sigue siendo el candidato y tiene el apoyo absoluto de la ejecutiva regional".

Hasta ahora, Chaves se había mantenido al margen de las batallas internas: ni públicamente ni en los órganos de la dirección se había pronunciado contra la opinión mayoritaria de la ejecutiva regional.

Este fue uno de los reproches de los guerristas: Chaves conocía la fecha del congreso y no se opuso. Un guerrista veía así la situación: "Chaves tiene poca fuerza para rebelarse contra la posición de los renovadores".

Renovadores y guerristas utilizaron ayer los mismos argumentos para defender el adelanto y retraso del congreso. Los primeros consideraron que era mejor alejar el debate y el relevo en la dirección hasta después de los comicios para no propiciar la pérdida de la mayoría absoluta.

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Los guerristas, por el contrario, creen que las discrepancias deben solventarse antes de las elecciones andaluzas y europeas, lo que condiciona cualquier cambio amplio en la ejecutiva. Esta tesis fue defendida por cinco de los ocho secretarios provinciales.

La secretaria provincial de Sevilla, Carmen Hermosín, intentó una salida pactada, consistente en que la ejecutiva debatiera una nueva fecha y se evitara la votación. Esta propuesta fue rechazada. "Es como si te dicen: 'Suicídate, porque matarte va a provocar demasiado estrépito", ironizó un guerrista.

Fuentes de los dos sectores reconocen que la votación fue "un mal resultado para el partido" y, dado el estrecho margen de votos, no despejó las dudas sobre la correlación de fuerzas. Los renovadores minimizaron los apoyos de Guerra, ya que entre los votos a favor se encontraban los de la mayoría de los 29 miembros de la ejecutiva y los ocho de la Fundación Nueva Época, integrada por antiguos cargos del PTE. Las cuatro abstenciones se atribuyen a Izquierda Socialista.

Dirigentes de uno y otro sector coincidieron en señalar que, al margen de la fecha de la asamblea regional, lo que en el fondo se debatía era la posición de Andalucía en el trascendental debate del congreso federal. Los guerristas, a juicio de portavoces de ambos grupos, pretenden utilizar el resultado para una posible permuta: mayor poder para Guerra a cambio de un apoyo cerrado para el candidato a la Junta.

[La víspera, Sanjuán había declarado en Málaga que el momento por el que atraviesa el partido es similar a "una olla a presión a la que hay que quitar vapor para que no explosione", informa Servimedia.]

La crisis abierta en el seno del PSOE de Andalucía, lejos de zanjarse, continuará abierta al menos hasta la celebración de los comités provinciales, el 23 de enero. En dichas asambleas se elegirán los delegados al congreso federal y al regional. Los renovadores anunciaron ayer que presentarán una lista y que será en estas votaciones en las que se comprobarán los apoyos de Guerra.

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