Bernès niega en el careo haber sobornado a jugadores
Jean-Pierre Bernès, el director general del Olímpico de Marsella (OM), salió ayer del Palacio de Justicia de Valenciennes, después de más de cinco horas de enfrentamientos verbales con sus cuatro acusadores, sin haber modificado en lo más mínimo su versión de los hechos: no trató de sobornarlos."El combate ha sido difícil", resumió Jean-Louis Pelletier, el abogado de Bernès, que añadió: "Espero que mi cliente sea puesto en libertad mañana por la mañana [hoy], ya que no hay ninguna prueba material en su contra respecto al supuesto soborno por parte del OM a futbolistas del Valenciennes en un partido de la Liga francesa.
Mientras tanto, seguían reunidos con el juez Beffy, que había detectado contradicciones entre sus declaraciones, Robert, Burruchaga y Glassmann, los tres jugadores implicados.
Despues de esas más de cinco horas de declaraciones y confrontaciones, no hay, pues, ningún dato nuevo como no sea la firmeza de Bernès, un hombre de 36 años al que la Prensa presenta como un imprevisible depresivo. El hecho de que los dos bandos se hayan mantenido en sus posiciones no soluciona la papeleta de la Federación Francesa, que ha aplazado sus decisiones confiando en la rapidez y la eficacia de la justicia.
El fiscal Montgolfier dijo: "No se trata de enterrar el asunto. No nos detendremos hasta haberlo ensayado todo, excepción hecha de los métodos de la Gestapo, aunque eso desagrade al señor Tapie". La referencia viene a cuento porque el presidente del OM ha comparado los procedimientos de la Justicia francesa con los de la Gestapo, lo que ha motivado una querella contra él presentada por el ministerio y los magistrados.
