Solidaridad en Europa contra la xenofobia
Con vergüenza y horror -como la mayoría de los alemanes- vemos las imágenes de Rostock y de otros lugares en Alemania donde ciudadanos extranjeros son aterrorizados y el terror recibe aplauso. Por eso entendemos las reacciones de nuestros vecinos, las compartimos.Pero también nos preocupa que, a veces, el racismo y el fascismo son presentados como características típicamente alemanas. Incluso en otros ámbitos como el deporte o la economía aparece la imagen del alemán horripilante. Si los problemas son reducidos a una característica nacional, la reflexión sobre una crítica justificada no puede tener lugar. De este modo se está perjudicando el mantenimiento de un espíritu abierto y receptor, y también el que haya diálogo -el aislamiento más bien promueve egoísmo nacional.
Deseamos solidaridad en Europa: debemos luchar juntamente y en todas partes contra la xenofobia.-
Beelker estudiante de Derecho y de español.