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La policía golpea a las parlamentarias de IU Almeida y Villalonga durante una protesta laboral

Agentes de policía golpearon, zarandearon y vejaron ayer a la diputada Cristina Almeida, la senadora Isabel Vilallonga y el diputado autonómico de Madrid Javier Doz, todos ellos de Izquierda Unida (IU), durante una concentración de un centenar de ex trabajadores de la empresa Plata Meneses, según denunció Izquierda Unida. Los incidentes se desencadenaron cuando la policía cargó contra los concentrados, que intentaban evitar el desmantelamiento y el traslado de la maquinaria y el utillaje de la fábrica desde Madrid a Gernika (Guipúzcoa), donde se encuentra la sede de Dalia, la nueva empresa propietaria de Plata Meneses. Cuatro personas resultaron heridas y otras dos fueron detenidas.

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Cristina Almeida había acudido a la sede de la Unión de Orfebres (antigua propietario de Plata Meneses), en la calle de Julián Camarillo, 29, de Madrid, para solidarizarse con los ex trabajadores de la firma. Según relató ayer, sobre las dos de la tarde se puso delante de un camión para impedir la carga, se identificó como diputada y pidió a los policías que mostraran la orden judicial por la que se ordenaba sacar de la empresa el material."He sido cogida en volandas, con un empujón terrible, por un policía llamado Puma 40, que me ha cogido y me ha puesto las manos en el pecho. Con otro más, se han tirado los dos encima y me han retenido en la pared como 5 o 10 minutos, mientras han sacado el camión a palos con todos los trabajadores". "Mientras tanto, otro policía me pegó un palo por abajo, aunque a ése no le he podido ver porque tenía al Puma 40 y al otro enfrente", añadió Almeida.

Según IU, la senadora y diputada autonómica Isabel Vilallonga recibió empujones y un golpe en una rodilla, y el diputado madrileño Javier Doz, una patada en los genitales. Según el testimonio de Almeida, el fotógrafo de Diario 16 Bernabé Cordón fue golpeado por un policía, que le dio un puñetazo, le rompió el objetivo de la cámara, le arrebató el carrete y se lo veló.

El conductor de Isabel Vilallonga, José Luis Cano, fue golpeado y posteriormente detenido cuando intentaba impedir que la senadora fuera golpeada por policías, según la denuncia de IU. El ex presidente del comité de empresa de Plata Meneses Aquilino Gabaldón también fue arrestado. Los dos detenidos fueron puestos en libertad posteriormente.

La senadora Vilallonga, que calificó el incidente de "intolerable e impropio de un Estado de derecho", pidió amparo al presidente del Senado. La diputada Almeida formuló idéntica solicitud al presidente del Congreso. Los titulares de ambas cámaras no se pronunciaron ayer sobre la demanda de amparo. Sí lo hizo, en cambio, el presidente de la Asamblea de Madrid, Pedro Díez (IU), quien expresó su amparo a los diputados autonómicos "vejados" [Vilallonga y Doz].

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El coordinador general de Izquierda Unida, Julio Anguita, declaró a Servimedia que "hay cosas intocables, y un diputado en el ejercicio de sus funciones, defendiendo a una parte del pueblo, es sagrado, es intocable, y no hay fuerza del orden que pueda hacer lo que ha hecho". "Así, la democracia se sigue erosionando", añadió Anguita.

El ministro del Interior, José Luis Corcuera, comparecerá hoy ante la comisión de Justicia' e Interior del Congreso para dar explicaciones sobre la actuación policial.

Versiones no coincidentes

La diputada ironizó: "No sabía que eran buenos tiempos". El titular de Interior pidió ayer disculpas a la diputada de Izquierda Unida "con independencia de lo que haya ocurrido", según manifestó en el Congreso, adonde acudió tras ser informado telefónicamente de los incidentes por el presidente de la Cámara baja, Félix Pons. "Si la diputada ha sentido que no ha sido tratada de acuerdo con su dignidad, eso basta para que yo le pida disculpas", añadió. Corcuera advirtió, no obstante, que las primeras informaciones de las que disponía no coincidían con la versión de Izquierda Unida.

Almeida se entrevistó con el titular del Congreso y con el ministro del Interior. Posteriormente manifestó que Corcuera le había dicho: "Te has puesto como en los buenos tiempos".

Un portavoz de la Delegación del Gobierno, cuyo titular en funciones tras el nombramiento de Segismundo Crespo como director general de Asuntos Sociales de la Comunidad Europea es Rafael Salaberri, aseguró ayer que "no ha habido ni agresión ni vejación" contra los parlamentarios y que la policía se limitó a cumplir su cometido.

Los incidentes se habían iniciado cuando los ex trabajadores de la Unión de Orfebres (fabricante de Plata Meneses) intentaron impedir la entrada del camión de la empresa vasca Dalia, que acudía, con protección policial, a recoger la maquinaria. Estos ex empleados protestaban contra la decisión de la comisión liquidadora de vender la marca Plata Meneses, el utillaje y la maquinaria de la Unión de Orfebres a Dalia, por 150 millones.

Uno de estos trabajadores es el secretario general de Comisiones Obreras de Madrid, Rodolfo Benito, quien encabezó una oferta de compra que fue rechazada por la comisión liquidadora, por lo que ha organizado una. campaña de protesta. Un expediente de rescisión de contrato firmado de común acuerdo con los sindicatos acabó con la relación laboral el pasado mes de junio. No obstante, los trabajadores anunciaron ayer que continuarán el encierro que mantienen desde hace 73 días dentro de la fábrica.

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