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El Tesoro amortizará anticipadamente las letras del Banco de España para reducir intereses durante 1991

La Dirección General del Tesoro ha iniciado la amortización anticipada de las Letras del Tesoro que están en la cartera del Banco de España y con vencimiento en este ejercicio con el propósito "de reducir la carga Financiera por intereses que ha de soportar el Tesoro Público durante 1991", según una reciente resolución de la Dirección General del Tesoro. La amortización, que se prolongará, hasta el 26 de febrero, afecta a un nominal de 534.364 millones de pesetas. El precio del reembolso final ascenderá a 524.149 millones de pesetas, ya que los intereses no devengados ascienden a 10.214 millones de pesetas.El Tesoro tendrá que renovar este año 10,9 billones de pesetas de deuda del Estado que vence a lo largo de este año de los 17 billones de pesetas a que asciende el total de deuda pública en circulación en estos momentos. El elevado volumen de deuda -más de un 65%-, que vence a lo largo del año es el resultado del mayor peso de las emisiones a corto plazo (letras y pagarés del Tesoro) frente a las de medio y largo plazo (bonos y obligaciones del Estado).

El objetivo del Tesoro para este año es invertir esta tendencia y conseguir por tanto que aumente el peso de las emisiones a mayor plazo. De los 10,9 billones de pesetas en deuda que tendrá que renovar el Tesoro a lo largo de este año, 7,3 billones corresponden a letras del Tesoro y 2,3 billones a pagarés.

El plazo de amortización de las letras -un año- obliga a renovar el total de estos títulos en circulación. La amortización de bonos y obligaciones, sin embargo, sólo será este año de poco más de un billón de pesetas, frente a lo cuatro billones de deuda viva en estos dos instrumentos.

A pesar de este calendario de amortización, el Tesoro ya ha conseguido a lo largo de este año que la financiación neta del Estado se reparta a partes iguales entre bonos y obligaciones, por un lado, y letras, por el otro. En cualquier caso, fuentes del Tesoro reconocen que un aumento adicional del peso de las emisiones a mayor plazo exige, como paso previo, una disminución de los tipos de interés.

Durante enero, el Tesoro tendrá que renovar 1,1 billones de los 10,9 billones de pesetas en deuda que se amortizan a lo largo del año. Abril es el mes con mayor volumen de amortizaciones prevista (casi 1,6 billones de pesetas), seguido de junio (1,4 billones) y marzo (1,2 billones). En el lado opuesto, se sitúan septiembre (0,3 billones de pesetas), noviembre (0,4 billones) y octubre (0,5 billones). La mayor parte de las amortizaciones se concentran, además, en el primer semestre del año.

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