_
_
_
_
_

El astrónomo Kepler falsificó datos que confirmaban su teoría sobre los planetas

Johannes Kepler, el padre de la astronomía moderna, falsificó algunos datos al presentar su teoría de cómo se mueven los planetas alrededor del sol, aparentemente para favorecer la aceptación de la idea por los escépticos. Un estudioso del tema, William H. Donahue, ha afirmado que las pruebas de la falsificación están contenidas en un elaborado mapa que Kepler presentó para apoyar su teoría.

Kepler demostró que los planetas se mueven en órbitas elípticas y no en círculos, como había indicado Copérnico. En el libro en que describe la idea, que data de 1609, decía que estaba confirmada por cálculos independientes de las posiciones de los planetas. En realidad, afirma Donahue, Kepler obtuvo los datos mediante cálculos basados en la propia teoría. Desde la antigüedad, el círculo había sido considerado como la única forma geométrica lo suficientemente perfecta como para describir el movimiento de los cuerpos celestes. El descubrimiento fue hecho por Donahue, un historiador de la ciencia, mientras traducía al inglés la obra maestra de Kepler, Astronomía Nova, y ha sido descrito en un reciente número de The Journal of the History of Astronomy.

Otros métodos

Los expertos dicen que la acción de Kepler puede ser menos reprensible de lo que parece. Los métodos de investigación y de comunicación en los inicios de la revolución científica eran a menudo bastante rudimentarios. "Kepler era una persona del pueblo que inventó la ciencia moderna", dijo Walter W. Stewart, un experto en fraude científico. "No está claro que sus normas fueran iguales a las nuestras".De hecho, otros gigantes de la ciencia están implicados en lo que parecen ser falsificaciones, probablemente para incrementar las oportunidades de que sus ideas radicales sean aceptadas por sus escépticos colegas. Gregor Mendel (1822-1884), el monje austriaco que fundó la ciencia de la genética, publicó diversas comunicaciones sobre su trabajo con los guisantes, que algunos expertos dicen que eran estadísticamente demasiado buenas para ser ciertas.

Isaac Newton (1642-1727), que formuló la ley de la gravitación universal, se apoyó en lucubraciones impropiamente matemáticas en su opus magnum para hacer que el poder predictivo de su obra pareciera mayor de lo que era. Galileo Galilei (15641642), el fundador del moderno método científico, escribió sobre experimentos tan difíciles de repetir que sus colegas dudaban de que él los hubiese hecho.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_