_
_
_
_
_
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

'Viaje con nosotros'

Aunque soy barcelonista por imperativo visceral-hereditario y catalanohablante, que no militante, he de decirle que discrepo, dentro de un orden y sin que sirva de precedente, de las afirmaciones vertidas por Vicente Verdú - por otra parte, uno de los articulistas más lúcidos y brillantes del país- en el comentario titulado Catalanes.Haciendo abstracción del delirante párrafo inicial que seguramente haría estremecer a Alan Finkielkraut por aquello de la trivialización del arte (¿será arte/ cultura la hamburguesa con catsup?) y de las retorcidas teorías sobre el supuesto paralelismo entre libertades nacionales catalanas y aplauso acrítico a Els Joglars, quisiera detenerme un momento en el tercero cuando, en su comienzo, dice que "en la noche del martes unos catalanes maldijeron y otros rieron", por cuanto no tuve la dicha de experimentar ninguna de tan catárticas sensaciones. Más bien todo lo contrario.

Más información
'Viaje con nosostros'

De acuerdo con su editorial y con sir Winston Churchill daría mi vida -tampoco hay para tanta grandilocuencia- para que Els Joglars y el tal Gurruchaga pudieran seguir escenificando números como el del otro día, por entender que siempre resulta saludable la ironía y casi afrodisiaca la autoaplicación de la misma. Pero pretender englobar bajo el casi teológico concepto de sentido del humor (una forma de religiosidad como otra cualquiera) cualquier astracanada es puro dislate, amén de un insulto a tanto oficiante-benefactor como Chaplin, Allen y un largo etcétera.

Cuando un tema da mucho que hablar, lee todo lo que haya que decir.
Suscríbete aquí

A mí no me molesta que se satirice al tantas veces grotesco señor Pujol, o a los dudosamente competentes jugadores del Barça, o a cualquier Virgen morena o rubia, camerunesa o catalana, pero no me gusta sentirme estafado. Y el que unos cómicos presuntamente ingeniosos como Els Joglars sean capaces de dar a luz un engendro como el del otro día cuando se pone a su disposición un medio tan colosal como la televisión es sencillamente deprimente.-

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_