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Goya y Picasso centran la muestra de pintura española del XIX en Moscú

Pilar Bonet

Una exposicion de pintores españoles del siglo XIX, que comprende 56 cuadros y está asegurada en casi 1.300 millones de pesetas, se ha inaugurado en Moscú esta semana bajo el título de Desde Goya hasta Picasso. La exposición ha sido organizada por el Museo del Prado y la galería Tetriakov de Moscú, en el marco del acuerdo cultural hispano-soviético, y constituye la muestra de un período de la pintura española del que apenas si existen ejemplos en los museos soviéticos.Se trata de la primera exposición internacional en su género realizada por el Museo del Prado como ente autónomo. Tanto el director de esta institución, Alfonso Emilio Pérez Sánchez, como el vicepresidente del patronato del museo, Pita de Andrade, se desplazaron a Moscú para la inauguración, que se celebró el miércoles día 25.

Ésta es la segunda muestra de pintura española que el Prado lleva a Moscú. En 1980 pudo verse una colección de arte español de los siglos XVI al XVIII, que se exhibió también en Leningrado. La actual exposición, que permanecerá seis semanas en Moscú y otras seis en el Museo de Arte Ruso de Leningrado, tendrá, su contrapartida en una muestra de pintores rusos del siglo XIX, que se inaugura el 27 de marzo en Madrid, y que comprende 56 obras del Museo de Arte Ruso de Leningrado.

Puntos en común

"Entre la pintura rusa y la pintura española del siglo XIX hay muchos puntos en común", dijo el director del Museo del Prado en una conferencia de prensa dada con motivo de la exposición. Entre las semejanzas a destacar, Pérez Sánchez enumeró la afirmación nacional antinapoleónica y la preocupación social que impregna las creaciones artísticas desde el clasicismo hasta el realismo. La estancia en Italia es otro de los elementos de formación común, tanto de artistas rusos como españoles. El Museo del Prado prepara una exposición análoga a la presentada, en Moscú en Estados Unidos y Francia, según dijo Pérez Sánchez.Entre los cuadros expuestos en Moscú destacan seis Goya, entre ellos El majo de la guitarra, La hoguera y La degollación, y un Picasso representando dos viejos campesinos, que fue pintado por el artista adolescente y que pertenece ahora al Museo de Málaga. Este cuadro y el Retrato de Moratín, de Francisco de Goya, perteneciente al Museo de Bilbao, son las dos únicas piezas de la exposición que no pertenecen al Museo del Prado. Otras obras son el Retrato de María Guerrero y Los niños en la playa, de Sorolla; cuadros históricos, como La presentación de Juan de Austria a Carlos V, de Rosales, y La reina Isabel la Católica en el monasterio de Miraflores, de Luis Álvarez, además de numerosos retratos y cuadros costumbristas.

La exposición ha sido instalada en las dependencias provisionales de la galería Tetriakov, actualmente cerrada por trabajos de reconstrucción.

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Sobre la firma

Pilar Bonet
Es periodista y analista. Durante 34 años fue corresponsal de EL PAÍS en la URSS, Rusia y espacio postsoviético.

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