Denuncias mutuas por agresiones entre la Guardia Civil y la Policía Municipal
La Guardia Civil y la Policía Municipal han presentado sendas denuncias ante el juzgado, en las que se acusan mutuamente de agresiones y resistencia a la autoridad. Los hechos que originaron las denuncias ocurrieron el día 3, cuando los guardias civiles Antonio Romera Garma y Julio A. Corredeira López, ambos de 20 años, fueron presuntamente agredidos a puñetazos mientras se hallaban esposados en las dependencias de la Policía Municipal de Santander.Los dos guardias civiles fueron detenidos por efectivos de la Policía Municipal cuando se dirigían a almorzar a las dependencias de la comandancia, vestidos ambos de paisano; su vestimenta -pantalones vaqueros y jerseis- parecía corresponder a las señas de identidad de dos gamberros cuya actuación había sido denunciada por una mujer a la Policía Municipal.
A empellones, según los guardias civiles dijeron al juez, fueron introducidos en un coche celular por la Policía Municipal, pese a que ambos declararon su pertenencia a la fuerza pública y pidieron ser llevados a su cuartel a fin de aclarar la situación. Desoyendo sus ruegos, y esposados, fueron conducidos a las instalaciones de la policía, donde -siempre según la versión de los guardias- fueron agredidos. Posteriormente, el forense apreció en ambos números hematornas y contusiones diversas en la cara. La Guardia Civil, pocos días más tarde, presentó denuncia ante el juzgado por detención ilegal y agresión, supuestamente a causa de la cual permanecen aún de baja en el servicio los protagonistas del suceso.
Por su parte, la Policía Municipal también ha denunciado ante el juzgado a los guardias civiles, por resistencia a la autoridad y por proferir insultos contra ellos.
