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Actividad política tras las elecciones municipales y autonómicas

La derecha ofrece sus votos a los socialistas en pueblos de Córdoba para aislar al PCE

Los votos minoritarios de los concejales electos por AP en varios ayuntamientos cordobeses pueden facilitar el acceso a la alcaldía a los cabeceras de las listas del PSOE, en detrimento del PCA. Cualquier decisión, no obstante, "se hará pública el jueves, después de la reunión del comité provincial", declaró ayer a EL PAÍS el vicepresidente de dicho comité, Vilavert.En Montilla, el empate a ocho concejales entre el PCA y el PSOE deja en las manos de los cuatro representantes de AP la elección del alcalde. El único concejal del PSA se abstendría, según manifestó "en caso de no llegarse a un acuerdo entre los 17 concejales de izquierdas, o me votaría a mí mismo". El futuro portavoz aliancista, el independiente Luis Puig, confirmó a este periódico ayer la voluntad del grupo de apoyar al PSOE, "porque creemos que para Montilla es preferible un alcalde socialista a uno comunista en estos momentos, no porque seamos anticomunistas".

El comité provincial de AP estudiará en la citada reunión del jueves el caso de cada ayuntamiento en concreto, aunque el secretario técnico de dicho partido, Luis Martínez, reconoció que se va a dar cierta autonomía a las agrupaciones locales, "por los condicionantes de cada municipio". En el ayuntamiento que ahora se renueva, el PCA tenía 12 concejales; cuatro UCD, tres el PSOE y dos AP bajo las siglas de Coalición Democrática. En la elección del pasado día 8, el PCA perdió esta mayoría, igualando los concejales del PSOE, si bien recibió 350 votos más que este partido.

En Espejo -en 1979, el PCA obtuvo seis concejales, tres UCD y dos PSOE-, los comunistas han perdido un edil y, aunque con uno menos, el PSOE, que cuenta con cuatro, en caso de que se confirme el rumor que circulaba en medios aliancistas, puede también alzarse con la alcaldía por el voto de los dos concejales de AP.

En Villafranca, donde en 1979 el entonces único concejal socialista, por virtud del pacto de la izquierda, decidió la alcaldía en favor del cabecera de la lista del PCA, igualado a cinco concejales entonces con UCD. Ahora, los comunistas, como en el caso de Espejo, han alcanzado cinco concejales, los socialistas cuatro y los dos votos de AP deben decidir la elección del alcalde.

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