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El grupo de bancos y La Caixa presentaron ayer nuevas ofertas, mejoradas, a la subasta de Banca Catalana

El grupo de bancos privados y la Caja de Pensiones (La Caixa) presentaron ayer, antes de que terminara el plazo fijado, nuevas ofertas al concurso abierto por el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) para la adjudicación de Banca Catalana. Aunque los nuevos pliegos mejoran las dos ofertas anteriormente hechas públicas, no se descarta en medios de la Administración que el FGD declare desierto, el concurso-subasta. La eventual adjudicación de Banca Catalana al pool bancario ha originado manifestaciones de su plantilla y la rotunda oposición del socialismo catalán.

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La Caixa presentó ayer su segunda puja, poco antes de cerrarse el segundo plazo del concurso. Se trata de un "reajuste de la primera oferta", en el que las variaciones sobre esta última no son muy sustanciales. Los principales cambios respecto a la primera puja son la reducción de la exigencia de que todos los créditos de dudoso cobro concedidos por Catalana a sus clientes fueran avalados por el Fondo y una ligera variación sobre los plazos de exención de coeficientes. La Caixa ha presentado esta nueva oferta, según diversas fuentes financieras, con objeto de no ofrecer una imagen de inflexibilidad y para demostrar coherencia con su actitud inicial de pujar por Catalana, si las condiciones no eran perjudiciales para ella.

Algo similar habría ocurrido con la oferta presentada por el grupo de bancos que, según alguna de las entidades que participan en la operación, mejoraría la primera de La Caixa en unos 15.000 millones de pesetas y también reduciría los plazos de coeficientes y de devolución de los préstamos. En relación a la primera oferta hecha por el mismo grupo de bancos, la rebaja en cuanto al coste se cifraría en unos 5.000 millones de pesetas.

En medios solventes se afirma que la estructura de ambas ofertas es muy similar. Las diferencias entre una y otra estriban en que la caja de ahorros es más exigente en la absorción de ciertas pérdidas acumuladas, mientras que lo es algo menos en la demanda de exención de coeficientes. En el punto clave del afianzamiento de los créditos dudosos, en que la primera demanda de la caja era el afianzamiento de la totalidad de ellos, la puja del pool bancario mejoró esa demanda, y en la segunda ronda parece que ha habido un acercamiento de ambos ofertantes.

En ciertos medios financieros y de la Administración no se descarta que, a la luz de las dos nuevas ofertas, el Fondo de Garantía de Depósitos decida en la reunión de su Comisión Gestora de hoy por la tarde no adjudicar Banca Catalana a ninguno de los interesados, por considerar que las condiciones no son todavía las exigibles.

Derecho de tanteo

Otros medios muy solventes próximos a los siete grandes de la banca española consideran que la oferta presentada por el pool se ajusta en gran medida a los deseos del Fondo de Garantía de Depósitos y que, por tanto, lo previsible es que la Comisión Gestora del Fondo decida adjudicarle Banca Catalana. El calendario previsto por estas fuentes incluiría que el Gobierno, en su reunión del miércoles, desistiese de utilizar el derecho de tanteo que la legislación le otorga.

De todas formas, existe además la posibilidad de que, en el caso de que el FGD adjudicara Banca Catalana, el gobernador del Banco de España, en el informe que debe dirigir al Consejo de Ministros para que estudie la posibilidad o no de ejercer el derecho de tanteo, se muestre contrario a la venta y recomiende que, por primera vez, se ejercite el tanteo justificando dicha toma de posición en que en esas condiciones merezca la pena el reflotamiento por parte del Estado. En medios de la Administración se estima que el ministro de Economía, Miguel Boyer, que se ha mostrado partidario de que Catalana permanezca en el sector privado, puede inclinarse por su paso al Estado si considera que, finalmente, las contrapartidas obtenidas no son suficientes.

Por otra parte, ayer se cerró el plazo de presentación de ofertas para la compra del Banco de Crédito e Inversiones, que tiene una gran implantación en Galicia, y está vinculado al grupo Catalana. El Fondo recibió sendas ofertas del Banco de Bilbao, Vizcaya, Central y Pastor, que estudiará próximamente.

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