Comienza en un momento histórico el XV Congreso del Partido Comunista italiano
Se abre hoy en Roma el XV Congreso del Partido Comunista de Italia (PCI). Se celebrará en el enorme Palacio de Deportes Al Eur. Han llegado ya a Roma cien delegaciones extranjeras de partidos comunistas, socialistas, socialdemócratas, laboristas y de los diversos movimientos de liberación.
Una de las primeras delegaciones que llegaron al aeropuerto de Roma fue la de Vietnam. No estará presente el Partido Comunista chino, a pesar de que ha sido formalmente invitado.
La delegación española estará representada por Manuel Azcárate, encargado de relacionel exteriores del PCE. Según informó el dirigente comunista Sergio Segré en una rueda de prensa, Carrillo había manifestado el deseo de asistir, pero le ha sido imposible por las elecciones municipales españolas.
El XV Congreso del PCI ha sido presentado ayer a la prensa italiana e internacional, en una rueda de prensa en la que participaron miembros de la dirección y de la secretaría del partido, como Segré, Pavolini, Cervetti, Totorella y Reiclin, director de L'Unita, órgano oficial del partido.
En el congreso participarán 1.181 delegados en representación de 1.790.000 inscritos. Aunque el partido ha perdido algunos miles de adeptos en los últimos años, este XV Congreso se realiza con 133.000 inscritos más que el congreso de 1975.
De los delegados, 258 son mujeres, cosa insólita en los congresos políticos italianos. Socialmente, el 30 % son obreros.
Después de diez años, es decir, desde que subió a la secretaría Enrico Berlinguer, este es el primer congreso que se hace por medio de «tesis». Estas 91 tesis han sido discutidas durante varios meses en todas las sedes de la periferia del partido.
Todos los observadores políticos ponen de manifiesto no sólo la importancia de este XV Congreso del Partido Comunista más fuerte de Occidente, sino también el momento histórico dificil en el que se celebra.
Relaciones difíciles con la DC
Se encuentra con una situación internacional difícil, con un eurocomunismo en crisis Y con partidos comunistas que se combaten entre ellos. Con una política interna que ve a los socialistas dispuestos a robarles votos y a una Democracia Cristiana con tentaciones de vuelta, no sólo al centro-izquierda, sino también al centro-derecha, como ha pedido uno de los vicesecretarios de la DC, Donat Cattin. Ya varios dirigentes del PCI han declarado que después de las próximas elecciones de junio probablemente «las relaciones del PCI con la DC serán más difíciles».Comentando cuáles han sido los «sentimientos» de la base en la discusión de las tesis, los dirigentes del partido declararon ayer que se manifestó clara la voluntad unitaria de todo el partido de ser fieles a la línea de los comunistas italianos de trabajar en la dirección de la política de unidad nacional.
Uno de los puntos más delicados que deberá tratar el XV Congreso que se abre esta mañana es el cambio del artículo quinto del estatuto sobre la preparación «marxista-leninista» de los adeptos a una pregunta de EL PAIS, el miembro de la dirección Tortorella afirmó que la base se ha manifestado unánime en cambiar este punto, pero que, al mismo tiempo, ha puesto en guardia sobre «su correcta interpretación». Es decir, los comunistas de la base quieren que este cambio no pueda significar una renuncia al patrimonio de Marx y de Lenin, que «forma parte de la riqueza y de la tradición del Partido Comunista». Lo que sí desean es que se siga haciendo una «lectura crítica» de los clásicos del marxismo, como es ya tradición del comunismo italiano desde Labriola a Gramsci y Togliati.
Los trabajos del congreso los abrirá esta mañana Berlinguer.
