_
_
_
_
_

Purito, desnudo

El español no logra defender la 'maglia' rosa del ataque del canadiense Hesjedal y la pierde por 9s

Carlos Arribas
Ryder Hesjedal, nuevo líder del Giro, tras la etapa de hoy.
Ryder Hesjedal, nuevo líder del Giro, tras la etapa de hoy.A. GAROFALO (REUTERS)

Hace 18 años justo, una cálida tarde de mayo, Luis Ocaña se pegó un tiro. No, no estaba viendo una etapa del Giro cuando tomó la decisión de morir, sino cerrando la maleta para marchar a Italia a comentar la que podría ser, que no fue, tercera victoria de Miguel Indurain. De todas maneras, seguramente, al único ciclista que puso de rodillas a Eddy Merckx en el Tour no le habría hecho tampoco muy feliz la contemplación de una etapa del Giro de este año, la de hoy mismo, la primera de gran montaña, los Alpes.

A Ocaña no le entendió el mundo, ni tampoco él entendió el mundo mucho más, y tampoco él, un hombre para el que el sufrimiento era simplemente el alimento básico del coraje, habría entendido que un ciclista como los de ahora, como, por ejemplo, el ganador de la etapa, Andrey Amador, se guíe por lo que les dice la pantalla del medidor de vatios en el manillar –“regula”, le decía en la eterna ascensión a los 2.000 metros de Breuil-Cervinia al costarricense, fugado desde el llano, desde el kilómetro 58, su director, José Luis Arrieta, “vete a menos de lo que puedas según el medidor de vatios”--, no por los impulsos del corazón, los únicos que pueden conducir a la locura, a la acción a la altura de la belleza del paisaje por lo menos, a la gesta.

Ni tampoco Ocaña, uno que solo entendía la vida como desafío al sentido común, siempre al ataque, habría entendido que los mejores del Giro, los que quieren ganarlo, los que lo ganarán, solo se muevan para defenderse, solo ataquen simbólicamente. Así atacó Ryder Hesjedal, un gigante canadiense, corredor oscuro y de fea pedalada, cuando la montaña ya había terminado; así se defendió Purito Rodríguez, que se desnudó ante todos queriendo coger la rueda del canadiense, el segundo en la general entonces, a 17s, y no pudiendo; así se escondieron los demás, Scarponi, Tiralongo, Kreuziger, Urán, Intxausti, Pozzovivo, a rueda del palio del Liquigas bajo el que pedaleaba, serenísimo entre algodones, como una alteza o un cardenal, Ivan Basso, inmóvil. Por 9s perdió el ciclista catalán la maglia rosa con la que tan guapo estaba, que tan feliz le hacía, y el dolor de la pérdida se vio en su mirada desesperada al cronómetro gigante de la meta al pasar bajo la pancarta.

El frío ha sido el rival número uno, he sufrido mucho, pensaba que no llegaba", asegura Purito

Los sabios del ciclismo miran la etapa, hacen cuentas con la general en la mano –los 10 primeros comprimidos en poco más de un minuto—y concluyen que esto es lo que hay, que nadie puede más, que los corredores tienen las pedaladas contadas, las fuerzas justas. Y los corredores hablan y repiten el discurso de los sabios. “El frío ha sido el rival número uno”, dijo Purito. “He sufrido mucho, pensaba que no llegaba. He intentado alcanzar a Hesjedal, coger su rueda cuando atacó y no he podido”. Y Basso, siempre la mueca serena: “Ha sido más dura de lo previsto la etapa por el frío y al final, tal como estaba, he preferido seguir, no probar a atacar”. “He hecho un esfuerzo y ha funcionado”, dijo el líder, Hesjedal, de 31 años, séptimo en el Tour de 2010 y solo un par de victorias importantes en su historial, la etapa de Velefique de la Vuelta 2009 y una en California en 2010. “No pienso en la victoria final sino en ir día a día”.

El valor de Amador, de 25 años, formado en el ciclismo amateur español, cuatro años en el equipo de Eusebio Unzue, residente en La Garriga (Barcelona) y novio de Laura, a quien dedicó la victoria, nace, como debe ser, en el dolor, en la resistencia, en la persistencia. El Tour pasado se convirtió en el héroe de Costa Rica al resistir con un tobillo roto desde la primera etapa. “Solo le podían haber ganado en Cervinia por huevos, y a huevos a Andrey no le gana nadie”, sintetizó su director, Arrieta, de un corredor que ya había estado en tres fugas y que el jueves quedó tercero en un final de gato y ratón que no supo manejar. En Cervinia, en otro final de astucia, sí supo hacerlo bien. Entró el primero, por consejo de Arrieta, en la última curva, pero se abrió lo suficiente para ofrecerle el interior al checo Barta, quien lanzó su sprint solo para lanzar a Amador hacia su primera victoria profesional.

El domingo, más montaña pero menos, puertos más cortos, más duros, de Lombardía en torno a Bérgamo y al lago de Como, con paso por el Culmine de San Pedro, donde Pedro Horrillo desafió a la vida por un barranco hace tres años.

Clasificaciones:

Etapa: 1. Andrey Amador, 5:33:36. 2. Jan Barta, m.t. 3. Alessandro de Marchi, a 2s. 4. Ryder Hesjedal, a 20. 5. Paolo Tiralongo, a 46. 6. Rigoberto Uran Uran, a 46. 7. Purito Rodríguez, a 46

General: 1. Ryder Hesjedal (Can /Garmin). 2. Purito Rodríguez, a 9s. 3. Paolo Tiralongo (Ita / Astana), a 41s. 4. Sandy Casar (Fra /Franaise des Jeux), a 1.05s. 5. Ivan Basso (Ita / Liquigas), a 1.06s. 6. Roman Kreuziger,  (Che / Astana), a 1.07s. 7. Beñat Intxausti, a 1.07s

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Carlos Arribas
Periodista de EL PAÍS desde 1990. Cubre regularmente los Juegos Olímpicos, las principales competiciones de ciclismo y atletismo y las noticias de dopaje.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_