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Cau Ferrat reabrirá después de casi cinco años de reformas

Concluye la restauración de los muebles del museo de Santiago Rusiñol

Tras casi cinco años cerrado, la profunda y minuciosa reforma del Museo Cau Ferrat de Sitges, casa y taller del artista modernista Santiago Rusiñol, ha entrado en la recta final y la previsión es que reabra a finales de año. Lo que acaba de concluir es la restauración que ha devuelto el antiguo esplendor a una veintena de muebles que forman parte de las colecciones, como unos pequeños cofres medievales, y también de la decoración de las estancias.

Esa restauración se ha llevado a cabo en el marco de un curso de especialistas del prestigioso Instituto de Conservación y Restauración Aplicada al Mueble (ICRAM). Entre las piezas “revividas” destacan dos ménsulas de finales del siglo XIX y un reloj de roble de la misma época del despacho de Rusiñol, una caja de madera del año 1458 con arquerías, rosetones y el escudo papal de Pío I y dos cofres del siglo XV, uno de nogal tallado, ubicado en el vestíbulo, y otro con motivos ojivales, situado en el Gran Salón del Cau.

“Mantener el museo cerrado ha sido triste pero nos ha permitido realizar una exhaustiva intervención de conservación y restauración, tanto del edificio como de su contenido, incluyendo todas las colecciones de pinturas, esculturas, vidrios, hierros y demás”, indica Anna Llanes, jefa de conservación de Museus de Sitges, que junto con el jefe de restauración Pep Pascual, ha supervisado los trabajos, que en el caso de los muebles han sido dirigidos por Marc Fabra, uno de los principales especialistas de España.

Las piezas tenían patologías similares: ataques de xilófagos, pérdida de elementos, suciedad, manchas o arañazos y algunas habían sido objeto de incorrectas actuaciones anteriores. “Todas las intervenciones se llevaron a cabo siguiendo los criterios más avanzados y también realizamos investigaciones para recuperar en los mínimos detalles el aspecto que el edificio tenía en vida de Rusiñol”, continúa Llanes, explicando que ya tan solo falta testar la estabilidad climática y las estrategias de seguridad. De ahí que la reapertura se prevea para este mismo año.

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