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Nueve detenidos por robar y vender en el mercado negro 40.000 kilos de naranjas

En los hurtos participaban transportistas, jefes de cuadrilla, recolectores y almacenes

Castellón -
Uno de los vehículos utilizados para el robo de naranjas.
Uno de los vehículos utilizados para el robo de naranjas.

La Policía Nacional de Vila-real ha detenido a nueve personas por robar presuntamente más de 40.000 kilos de naranjas e intentar comercializarlas en el mercado negro. Los arrestados son dos transportistas y jefes de cuadrilla y cinco collidors, a quienes se les imputa un delito de hurto, y los responsables de tres almacenes de fruta ubicados en Nules y en la localidad valenciana de Quart de les Valls como presuntos autores de un delito de receptación.

La investigación se inició el pasado mes de marzo, después de que varios propietarios de huertos en el término municipal de Vila-real denunciaran la sustracción de más de 40.000 kilos de naranjas de variedades tardías. El dispositivo policial se centró entonces en averiguar qué almacenes de las localidades próximas trabajaban con la fruta procedente de la espigolà, es decir, la naranja de menor calibre pero con igual salida al mercado internacional, exportada mayoritariamente a Polonia.

Una vez localizados, y tras el seguimiento y vigilancia de los tres almacenes, en Nules y Quart de les Valls, los agentes interceptaron a dos transportistas que trataban de vender 8.000 y 12.000 kilos de naranjas, respectivamente, sin contar con la autorización de recogida por parte de los responsables de los huertos. A estos arrestos se sumó el de la totalidad de los integrantes de la cuadrilla que trabajaba para uno de los conductores, “que además era reincidente y contaba con antecedentes policiales por hechos idénticos”, según ha informado la Policía Nacional de Vila-real.

Tras la inspección de los albaranes de entrada de naranjas en los almacenes investigados los agentes comprobaron que otros 25.000 kilos habían sido admitidos de manera ilegal, por lo que se procedió a la detención e imputación de los responsables de las naves como presuntos autores de un delito de receptación.

Los siete imputados por robo han pasado a disposición judicial, mientras que los responsables de los almacenes han quedado en libertad con cargos tras prestar declaración ante el juez, según fuentes de la Comisaría Provincial de Castellón.

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