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60 obras del Prado se exponen en Lleida

La muestra incluye obras maestras de artistas como Goya, Rubens, El Greco, Luca Giordano, Sorolla, Murillo y Velázquez

Retrato de Isabel de Francia, realizado por Frans Pourbus.
Retrato de Isabel de Francia, realizado por Frans Pourbus.

CaixaForum Lleida acoge en sus salas hasta el próximo 20 de julio 60 pinturas procedentes de los fondos del Museo del Prado. Els objectes parlen, título de la exposición, es un recorrido “didáctico y divulgativo” por las colecciones de la bicentenaria pinacoteca madrileña.

Organizada por el Museo del Prado y la Obra Social de La Caixa, se trata de la primera de las exposiciones realizadas en Lleida gracias al acuerdo de colaboración firmado entre las dos instituciones para acercar el arte a todo tipo de públicos. La exposición ha pasado por Girona y dentro de cinco meses recalará en Tarragona.

Fernando Pérez Suescum, comisario de la exposición, resaltó la excepcionalidad de esta exposición que reúne una selección rigurosa de pinturas y objetos de las principales escuelas (española, flamenca, italiana y francesa) de entre los siglos XVI y XIX. Diez de las 60 obras están expuestas habitualmente en alguna de las salas del Prado. “Es una exposición con un marcado carácter didáctico y que puede entender todo el mundo”, señala Pérez Suescum.

La muestra incluye algunas de las obras maestras de artistas como Goya, Rubens, Juan Van der Hamen, El Greco, Luca Giordano, Sorolla, Murillo, Velázquez, Zurbarán, José de Ribera, Vicente López y Brueghel el Viejo. La exposición se articula alrededor de cuatro itinerarios o secciones temáticas: la clave está en el objeto, los objetos nos retratan, un mensaje escondido y el coleccionismo.

Las obras escogidas ofrecen una visión sobre los objetos que acompañaban a hombres y mujeres de su época en su vida cotidiana o en momentos de especial significación y con los que quisieron ser retratados. Esos objetos, entre los que figuran relicarios, medallas, abanicos, bicornios, paletas, pinceles, alimentos o armaduras, invitan al público visitante a establecer un diálogo con las obras y obtener abundante información sobre los personajes, el estatus, costumbres de la época y el contexto socioeconómico, así como también del poder adquisitivo de la persona que los encargó.

En el caso de los retratos, el espectador ha de fijarse en la persona retratada, en su rostro, en su mirada, en su indumentaria y en sus peinados, pero también en los objetos que lleva en sus manos o colgados o que aparecen a su lado. A veces, los objetos de los cuadros son los auténticos protagonistas de la composición y elementos clave para reconocer la escena representada. Por ejemplo, en el retrato que Goya hizo de la duquesa de Abrantes, hija menor de los duques de Osuna, la aristócrata luce un vestido muy escotado de estilo francés y una corona de flores sobre el pelo. Además, sostiene en la mano una partitura a través de la cual el pintor ha querido transmitir la afición por la música de la modelo y el refinado ambiente intelectual en el que se educó.

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