El Gobierno intenta aplacar a los mercados con más transparencia

Tras una semana de intenso acoso a la deuda española por parte de los inversores, el Gobierno movió ayer ficha para intentar aplacar a los mercados. La receta elegida es la transparencia, con más información sobre el estado de las cuentas públicas y de las entidades financieras, que son las que generan más dudas en los mercados. En el contraataque participaron el presidente del Gobierno, la vicepresidenta económica y el Banco de España, que lograron un respiro para la prima de riesgo de la deuda tras el nuevo máximo de la era euro marcado a primera hora.

Zapatero aseguró que descarta "absolutamente" un rescate y alertó a los inversores que apuesten contra España que "se van a equivocar". El subgobernador del Banco de España tomó el relevo al anunciar que impondrá a bancos y cajas la máxima transparencia sobre su riesgo inmobiliario, del que deberán informar trimestralmente con todo detalle. El Banco de España proclamó además que ha revisado las pruebas de resistencia de julio y que mantienen su validez y vigencia. Finalmente, la ministra de Economía, Elena Salgado, prometió también mayor transparencia en las cuentas públicas y anunció que necesitará apelar menos al mercado en lo que queda de año.