Un nuevo hito de la Vitoria medieval
El complejo museístico Bibat abre sus puertas - El centro establece un diálogo entre la colección de Arqueología de Álava y la de Naipes Fournier
Como un nuevo foco cultural del Casco Medieval de Vitoria, ayer se inauguró el Bibat, complejo museístico que suma el Museo de Naipes, ya existente en el palacio renacentista de Bendaña, y la nueva sede del Arqueológico de Álava en un edificio de nueva planta contiguo al palacio y proyectado por el arquitecto Patxi Mangado (Pamplona, 1951). Dialogan así dos colecciones en sendas construcciones que suponen una referencia imprescindible de la historia, el patrimonio, los monumentos y el futuro alavés. "El Bibat nace como un hito en la cultura vasca", resumió la diputada foral de Cultura, Lorena López de Lacalle, de EA.
La inauguración contó con el protocolo de las grandes ocasiones, con representantes alaveses de las principales instituciones, del Parlamento al Ayuntamiento de Vitoria, la Vital, las Juntas o, por supuesto, la Diputación, impulsora de un proyecto que comenzó a gestarse en otoño de 2000.
Arqueología exhibirá 1.500 piezas y Naipes, 220 barajas
La obra ha pasado por un sinfín de avatares, de retrasos en los plazos de las constructoras al robo de 22 toneladas de las placas de bronce que cubren la fachada, pasando por la necesaria reordenación última del espacio expositivo por el fraude de Iruña-Veleia. Hasta que se comprobó la falsedad de los "hallazgos excepcionales" de esta ciudad romana, se había reservado un lugar especial para exhibir las supuestas inscripciones en euskera, los jeroglíficos egipcios o los grabados cristianos. Desvelado el engaño, el departamento foral de Cultura ha tenido que reorganizar el espacio destinado a la época romana, evitando cualquier referencia a esas piezas.
Solventados estos problemas, la puesta de largo de la nueva infraestructura cultural se desarrollo en un acto austero: se eliminó el tradicional ágape que sigue a toda inauguración, improcedente en tiempos de crisis. Eso sí, no faltaron los discursos. A las palabras de la responsable de Cultura, siguieron las del diputado general, Xavier Agirre, quien definió el Bibat como "el mayor espejo de la trayectoria cultural de todo un pueblo, el alavés". Cerró el acto el lehendakari en funciones, Juan José Ibarretxe, quien recordó que este nuevo foco cultural "es la demostración de que tenemos que estar orgullosos de nuestro pasado y, de esa manera, construir el futuro".
Al frente del Bibat se encuentra la experta en patrimonio artístico y arqueológico Itziar Ruiz de Erentxun. Se enfrenta a la gestión de dos colecciones de muy distinta naturaleza, integradas por decenas de miles de objetos de los que sólo se exhibe una pequeña parte. En concreto, Arqueología mostrará 1.500 piezas seleccionadas de 7.500 cajas de materiales, mientras que Naipes exhibe 220 barajas sobre un total de 22.000.
La sede de Naipes apenas ha experimentado reformas. Mientras, el edificio ideado por Mangado dispondrá de 4.200 metros cuadrados de superficie útil distribuidos en cuatro plantas y dos sótanos. "Mi intención ha sido crear un edificio que pretende materializar el tiempo, esencia de la arqueología", señaló en su día a EL PAÍS el arquitecto navarro.
Las tres salas (una por piso) de la exposición permanente mantienen la misma estructura con unos lucernarios truncados de luz natural que actúan como rayos lumínicos que atraviesan el edificio. En el primer piso se exhiben los primeros vestigios que fueron hallados en Álava, desde la Paleontología hasta la llegada de los metales, desde las puntas de silex a los abalorios que se han encontrado en diferentes enterramientos de las edades del Bronce y el Hierro.
Las plantas segunda y tercera confirman la disposición ya anunciada en la primera: un criterio cronológico principal, salpicado con diversas referencias a los principales yacimientos arqueológicos alaveses. Y, entre ellos, la ciudad romana de Iruña-Veleia, con especial relavancia para la Dama de Iruña o un hito romano de la calzada Astorga-Burdeos, que pasaba junto a Veleia.
Lo que no hay que perderse
- El método arqueológico: En su primera planta, el Bibat introduce al visitante en la buena praxis arqueológica en un espacio que muestra cómo se trabaja en una excavación, qué se encuentra y cómo se documenta e interpreta
- Del Paleolítico a la Edad de Bronce: En esta primera planta, se exhiben ajuares caseros, piezas decorativas, restos de rituales funerarios y útiles para la caza o la pesca de distintos yacimientos.
- Poblado de la Hoya: La segunda planta, dedicada a la Edad del Hierro, exhibe algunos de los hallazgos procedentes de La Hoya.
- De Roma a la Edad Media. .En el tercer espacio se comprueba la importante presencia romana en el territorio alavés, con Veleia como referente.
- Naipes: Las técnicas de impresión de los naipes a lo largo de la Historia sirven como aperitivo para un atractivo paseo por este juego.
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