Taxistas de Barajas fuerzan a la policía a impedir que operen furgonetas privadas

Los taxistas iniciaron ayer la caza de los "intrusos". Cumpliendo con sus amenazas, unos 50 trabajadores del gremio paralizaron durante 15 minutos el servicio de recogida de pasajeros en el aeropuerto de Barajas para protestar por el "intrusismo de algunas empresas que transportan a viajeros de forma ilegal". Según los taxistas, estas compañías utilizan visados de transporte de viajeros registrados en otras regiones, lo que, según ellos, les impide actuar en Madrid. Representantes de estas empresas aseguran que el visado es de ámbito nacional y que su situación es legal.

La protesta comenzó a primera hora de la mañana de ayer con una manifestación de los taxistas por las terminales del aeropuerto. Armados de altavoces, silbatos y la potencia de sus propias gargantas, unos 50 conductores -en Madrid circulan más de 15.000 taxis con licencia actualmente- difundieron un mensaje claro: "Lucha contra los golfos que nos quitan el pan".

El presidente de la federación convocante, la Federación Profesional de Taxis de Madrid, Julio Sanz García, criticó que, pese a las denuncias del sector durante años, las autoridades autonómicas, municipales y el aeropuerto de Barajas han permitido la actuación de estas formas de transporte ilegales.

Otro portavoz de la federación, Francisco Merchante, explicó que muchas de estas empresas "mandan furgonetas, normalmente de la marca Volkswagen o Mercedes, al aeropuerto madrileño con visados de transporte de otras comunidades autónomas".

Esas empresas circulan con un visado de transporte con conductor (VTC) que conceden los ayuntamientos y los gobiernos regionales. Con ese permiso, las empresas ofrecen servicios a hoteles o agencias de viajes, que incluyen en sus paquetes el transporte de los clientes desde el aeropuerto hasta el hotel y viceversa.

Según los taxistas, lo que hacen en realidad esas empresas es recoger a los clientes en Barajas como si fueran taxis, montarlos en grupos y cobrarles individualmente unas tarifas no sujetas al reglamento del sector. "Hemos llegado a contar unas 300 furgonetas que trabajan diariamente en Barajas", afirmó un portavoz de la federación.

Algunos de esos vehículos fueron señalados ayer con el dedo. Grupos de taxistas encolerizados por la situación avisaron a los policías municipales destacados en el aeropuerto y denunciaron los hechos. Los agentes, tras comprobar que algunos de los vehículos procedían de Asturias, Cantabria o Valencia para recoger a clientes, pidieron a los conductores que abandonasen el servicio. Los clientes tuvieron que apearse sin rechistar.

Una rueda pinchada

Un pinchazo en una de las ruedas de estas furgonetas fue el único incidente que se registró durante la protesta. Los taxistas aseguran que ellos no tuvieron nada que ver. "Nuestra protesta es pacífica y, por ahora, todas las manifestaciones que hagamos, incluida la de mañana [por hoy] serán en ese sentido", anunció Merchante.

Sí hubo ayer dicusiones salidas de tono entre los taxistas y los conductores de las empresas denunciadas y con Juan Orti-güela, el gerente de Aerocity, una de las compañías que opera en el aeropuerto madrileño. Ortigüela acusó a los taxistas de estar amedrentando a sus clientes: "Nuestra actividad es totalmente legal. Tenemos autorización oficial para trabajar en el aeropuerto y recogemos a viajeros que han contratado previamente el servicio". Representantes de Aerocity, aseguran que aunque el visado de transporte con que cuentan esté expedido de otra región, la ley permite operar fuera de ella si el cliente contrata previamente los servicios.

En esta misma línea, Zonturent, la patronal mayoritaria en el sector de empresas de vehículos con y sin conductor en España, difundió ayer un comunicado en el que manifiesta su apoyo a las compañías que desarrollan su labor "de manera total y absolutamente legal y ajustándose a la legislación vigente" en el aeropuerto de Barajas.

Fuentes del Ayuntamiento aseguran que éste "está haciendo lo posible para acabar con el intrusismo en el sector" y que ya ha iniciado una serie de reuniones con la Comunidad y los responsables del aeropuerto para estudiar las reivindicaciones de los taxistas.

Hace unas semanas, el delegado de Seguridad municipal, Fernando Autrán, señaló la complejidad del asunto. "Hay que distinguir entre los taxistas piratas, que no tienen licencia, y estas empresas que operan, al parecer con una cobertura legal", advirtió.