La empresa catalana denuncia retrasos en las devoluciones del IVA
"Hacienda paga más tarde que nunca". Así de rotunda se muestra la patronal catalana Fomento del Trabajo al referirse a las devoluciones del IVA a las empresas. "Sólo terminan cediendo ante las que de verdad han puesto en una situación límite. Al resto le retrasan los pagos como pueden", lamentan. La Agencia Tributaria no sólo niega que pague tarde, sino que asegura que ha acelerado las devoluciones.
La situación, dice de Joaquín Trigo, director ejecutivo de Fomento del Trabajo, no es nueva. Los retrasos se suceden "desde hace dos años", pero en un momento como éste, se han agravado y ha puesto a las empresas entre la espada y la pared. "El margen que tienen muchas es mínimo ahora, así que les afecta más si encima no se les da lo que es suyo...", lamenta. Una empresa de promoción, por ejemplo, les ha contado que tras hacer una auditoría específica para demostrar que merecían la devolución sólo obtuvieron la posibilidad de recibir la cuarta parte de lo que les debían. "Hacienda puede decir misa, pero tienen menos dinero y hacen lo que pueden por pagar tarde y poco", insiste Trigo.
Fomento del Trabajo asegura que las quejas no dejan de aumentar
Pimec, que representa a pequeña y mediana empresa, también constata este retraso. "Hay una empresa del sector de la exportación a la que le deben un millón de euros desde hace un año", comentan. Y asegura, que no son los únicos que sufren retrasos. "Se oyen cada vez más quejas. Por una parte, es posible que haya un aumento en los retrasos, pero sobre todo el problema ahora es que las empresas están hipersensibles a cualquier eventualidad. Antes podían retrasarse un mes, pero los bancos apoyaban, había más paciencia. Ahora no pueden esperar", confirma un asesor fiscal.
La asociación empresarial CECOT se muestra menos beligerante y señala que la situación no ha empeorado. Explica que las empresas a las que, en general, más se les retrasan los pagos es a las exportadoras. Las empresas que compran a sus proveedores en España con IVA y después venden el producto al exterior tienen derecho a la devolución del impuesto.Sin embargo, "en 8 de cada 10 casos en los que no se devuelve es porque Hacienda no ve clara la documentación y pide nuevos trámites", señala la patronal. El problema, se quejan algunas empresas, es que no se comunica que hay errores hasta que termina el plazo de devolución, seis meses después. Cuando se les comunica ese error, se subsana y se vuelve a estudiar el caso, pasan meses.
Fomento incluye también entre los más damnificados a los que hacen una petición de demanda por un atípico; es decir, por exportar algo por primera vez o por cambiar mucho de volumen. En estos casos, el periodo de verificación de datos por parte de Hacienda es más largo. Si la Administración sobrepasa el tiempo legal, después pagará intereses de demora. A cambio, la empresa, habrá tenido que recurrir a préstamos durante la espera, habrá soportado intereses altos.
Hacienda niega que haya retrasos. De hecho, insiste en que las cifras le dan la razón. Según el último informe de recaudación, entre enero y noviembre de 2009 aumentaron las devoluciones el 12,5%, hasta los 33.544 millones de euros. Aunque los volúmenes a lo largo del año son irregulares. Hay meses en los que aumentó hasta el 65% (noviembre) y otros en los que cayó casi el 20%. Pero el saldo final es muy positivo, y CECOT y algunos asesores fiscales están de acuerdo. "Es parte del esfuerzo del plan que se puso en marcha en verano para acelerar la devolución de IRPF e IVA a las empresas, como medida contra la crisis", explica un portavoz. A las empresas a las que no se les devuelve, explica, es porque debe de haber cometido errores en la documentación.
"No sé qué datos puede tener Hacienda. Pero sí conozco las quejas que recibimos, que cada vez son mayores. Algunas empresas lo están pasando mal. Y las administraciones no siempre actúan", lamenta Trigo. La Generalitat, puntualiza, sí ha hecho algunas acciones positivas para pagar lo que adeuda a muchas empresas. "Pero la Administración central no pone de su parte. Y los municipios, todavía menos", zanja Trigo.
"Me deben tres millones de euros"
En Unexporc están desesperados. Esta empresa de Girona que se dedica a la exportación cárnica asegura que lleva desde junio sin recibir las devoluciones del IVA que le corresponden. "Hacienda nos debe en total casi tres millones de euros", dice Jens Agerskov, gerente de la empresa, que funciona desde principios de la década de 1990.
Agerskov, danés, no piensa claudicar. Le indigna que no le den lo que es suyo, precisamente desde Hacienda, porque dice que él siempre ha sido muy cuidadoso con llevarlo todo al día. "Pueden mirar nuestras cuentas siempre que quieran. Está todo impecable", les reta. "En otros países de Europa se trabaja por ayudar a la empresa. Aquí siento que me están ahogando. Aguantamos porque la empresa es fuerte. Pero hay otras que no podrán soportar tanta presión", se queja. Tres millones, repite, es mucho dinero para una empresa que factura cerca de 80 millones al año. Y aunque en la exportadora son pocos empleados, dan trabajo a muchos. A los transportistas y a más de 800 personas que trabajan en sus proveedores cárnicos, Batallé (Riudarenes) y el matadero de Avinyó (Bages).
Han reclamado decenas de veces el dinero. Primero les dijeron que había un error en un documento. Aseguran que lo subsanaron. Y, tras esperar un tiempo, comprobaron en Internet que todas sus peticiones habían sido aceptadas. Pero el dinero no llegó.
En diciembre su gestoría pidió explicaciones a la delegación de grandes contribuyentes de Hacienda de Barcelona y explicó a varios responsables que la empresa iba a empezar a tener problemas de liquidez por su culpa. "Y nos dijeron que a partir del día 20 de diciembre liberarían algunos pagos, cuando tuvieran dinero". Pero tampoco llegó el ingreso. "Ahora nos han vuelto a convocar a una reunión. Dicen que en las peticiones de agosto a noviembre podía haber otro error", repasa la empleada de Unexporc encargada de la administración. "Si el error es de agosto, ¿por qué esperan a enero para decirlo, después de asegurar que estaba todo correcto?", se pregunta. "Si tardan mucho dicen que nos pagarán intereses de demora. Pero eso para nosotros será calderilla comparado con los intereses de las pólizas de crédito con los bancos para pagar a los proveedores", se queja. En la Agencia Tributaria no pueden comentar casos concretos, pero apuntan que en cuando hay retrasos es porque falta documentación o porque se están revisando las cuentas de la compañía.
"Muchos empresarios conocidos me han dicho que estoy loco por hacer tanto ruido con esto. Ellos prefieren callar aunque también sufren retrasos, porque creen que hacerlo público traerá problemas. Pero yo no tengo nada que ocultar", defiende Agerskov.
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